Tres letras dominaron el espacio cripto el año pasado y prometen seguir creciendo en 2022: NFT, siglás de tokens no fungibles, son un nuevo tipo de activo digital que se destaca por:
Así, estos activos inauguraron el "arte cripto", es decir, una forma de crear coleccionables que se generan y comercializan en una blockchain.
Para obtener ganancias con un token no fungible primero hay que crearlo. Entonces, lo primero es tener contenido original: una imagen (foto o dibujo), video, canción, un poema, etc.
Nicolás Verderosa, cofundador de la plataforma de venta de NTF Kephi Gallery, indica a iProUP que el próximo paso será contar con "una billetera sin custodia, que puede ser Metamask, una de las más comunes; o KardiaChain Wallet. Luego hay que conectar esa billetera a cualquier plataforma de mercado NFT. Y, acto seguido, deben transferirse fondos para realizar pagos.
Por ejemplo, si el marketplace de NFT funciona con Ethereum, habrá que cargarla con ethers. En general, subir una obra a una plataforma cuesta cerca de 100 dólares. Las más importantes son:
Verderosa precisa que con estos pasos se crea un usuario asociado a la billetera y un perfil de usuario para subir las obras a un mercado NFT. La plataforma elegida le ofrecerá herramientas para convertir cada obra ( archivo de imagen, audio, video o documento) en un token no fungible. Se pueden generar colecciones y NFT únicos (una sola copia) o múltiples.
"Uno puede crear una colección y colocar varios NFT dentro, asociándolos o dándole una especie de línea argumental o hilo conductor. Esto tiene como ventaja que los conjuntos de obras se tienden a vender más porque los coleccionistas quieren tener todas las copias", resalta Verderosa.
Según el ejecutivo, subir un NFT a una plataforma es un procedimiento tan sencillo como guardar cualquier archivo en Google Drive, Dropbox u otro sistema de almacenamiento en la nube.
Además, el 90% del valor de venta se lo lleva el dueño del material, quien además puede –según Verderosa– fijar un monto de regalía para el mercado secundario. De esta forma:
Es importante destacar que los NFT son un activo digital diseñado para ser únicos, característica que lo asemeja a coleccionables tradicionales como obras de arte, estampillas y discos de vinilo.
La blockchain detrás de la revolución NFT es Ethereum, que permite incorporar información adicional a cada archivo. Así, queda registrado de modo permanente un sello o certificado que indica que ese es el "archivo original", a diferencia de cualquier contenido digital del que pueden hacerse múltiples copias, indistinguibles entre sí.
Maximiliano Hinz, Latam Operations Director de Binance, puntualiza a iProUP que estos activos son una nueva forma de certificar quién es dueño de una obra. "Hasta hoy, debía estar inscripta, pero gracias a los NFT podemos respaldar nuestra propiedad de algo".
"Puedo pintar un cuadro y representarlo en un token no fungible, el cual pasa a ser un derivado de esa obra. Y lo puedo vender después", añade a iProUP Leo Elduayen, cofounder de Koibanx.
Matías Bari, cofundador de SatoshiTango, acerca un ejemplo futbolero: "Por ejemplo, la FIFA puede enviar una entrada para el Mundial y la podés guardar en tu wallet. Sabés que es original. En cambio, si tenías un ticket en formato PDF y alguien lo usaba antes, ya no servía".
Manuel Beaudroit, CEO de Belo, asegura a iProUP que "cualquiera puede hacer uno. Hasta puede vender los dibujos de su hijo" en una plataforma y guardarlo para siempre en la blockchain.
"Así se genera el NFT para poner a la venta. No es para nada complejo. Lo interesante es que el creador recibe casi todo el dinero", remarca el ejecutivo, y agrega que "comprar un certificado de originalidad para una obra digital era muy difícil hasta hace poco: ahora tenés el token que dice que sos el dueño".
Bari agrega que la gente podrá pagar miles de dólares para obtener, por ejemplo, un arma exclusiva en el videojuego Fortnite, de la mismo modo que lo hace para conseguir la guitarra que perteneció a Keith Richards. Se puede comprar la misma marca en un comercio, pero como la usó él hay muchos que le asignan un valor mayor. Los NFT tienen esa misma lógica", puntualiza.
Ignacio Giménez, de Lemon Cash, señala a iProUP que los defensores de esta tecnología tienen como objetivo crear un mercado con valor percibido a través de la autenticación y la escasez.
"Si bien hay claros beneficios para vendedores y creadores, hay dos veredas entre los compradores: algunos, con la intención de apoyar a artistas y deportistas favoritos; otros, pura especulación".
En tanto, Hinz subraya que "nos encontramos frente a una nueva etapa de coleccionismo. Hoy, si quisiéramos usar una imagen conocida para algo, deberíamos pagarle regalías al dueño. Con los NFT cambió la forma de ver al propietario, pero el concepto sigue siendo similar: solamente mejoramos quiénes tienen la custodia de los títulos", completa.
Los expertos afirman que la compraventa de NFT no está vedada por las leyes argentinas, por lo que reina un principio básico del derecho: "Todo lo que no está prohibido está permitido".
Guillermo Navarro, abogado experto en nuevas tecnologías del estudio Bildenlex, revela a iProUP que reciben numerosas consultas de sus clientes sobre cuestiones contractuales del proceso de transformar un activo digital en un token no fungible.
"Las inquietudes más habituales están relacionadas con la propiedad intelectual, o si el vendedor conserva algún derecho o no", detalla Navarro. Otros, en cambio, preguntan qué ocurre si modifica una obra, qué derechos transfieren en el NFT y cómo es el caso particular de un remix e imágenes con uso de marcas.
Sin embargo, al ser una actividad económica, el intercambio y tenencia de estos activos está gravado. Andrés Burecovics, de B&P Consulting, señala a iProUP que "para comprender los aspectos legales y tributarios de estas nuevas tecnologías, es fundamental entender su naturaleza básica". En este sentido, enumera:
Víctor Castillejo, abogado especializado, indica a iProUP: "Muchos se engañan al creer que al ser sistemas descentralizados no se pagan impuestos por actividades que están gravadas".
"Los resultados derivados de la venta de 'monedas digitales' están gravados en Ganancias. Por lo tanto, por esa vía también puede aplicar un ingreso si, por ejemplo, se compra y vende un NFT que la AFIP lo considere una moneda digital", sostiene Castillejo.
El arte cripto crece en Argentina y, si bien los costos de ingreso son en dólares, también lo son las ganancias y la posibilidad de participar de una galería global. Todo gracias a la economía digital.