Las criptomonedas generaron interés en los ahorristas e inversores de todo el mundo desde que comenzaron a utilizarse en 2009, y cada vez son vistas como una herramienta "clave" para proteger sus patrimonios y obtener ganancias a partir de estas.
Pero no son los únicos interesados en este tipo de activos digitales.
Los Estados y los organismos de los que forman parte también las tienen en la mira con un objetivo común: regularlas.
Ahora, tras los remarcados derrumbes en la industria, estos actores vuelven a poner sobre la mesa la necesidad de establecer un marco regulatorio sobre la misma.
Entre aquellos que más al pendiente estuvieron del mercado, aparece el grupo de naciones G7, que insistió en la necesidad de que los reguladores de las principales economías del planeta impulsen un mayor accionar en tratativas legales sobre los criptoactivos.
El ente multilateral que integran varios de los principales líderes financieros y politícos del mundo (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) abordó la temática el 19 y el 20 de mayo en asamblea.
En un documento difundido, el G7 tocó este y otros temas de interés internacional, entre los que se incluyeron el conflicto bélico por la invasión de Rusia a Ucrania; la estabilidad macroeconómica; las políticas financieras y la digitalización.
Sobre este último ítem, el organismo hizo hincapié en el rubro cripto, remarcando la necesidad de que estos nuevos activos queden enmarcados bajo los mismos estándares normativos que el resto del sistema financiero.
En concreto, el G7 instó al Consejo de Estabilidad Financiera (FSB) a establecer reglas más estrictas de cumplimiento para combatir el lavado de dinero.
El comunicado no menciona especifícamente el caso de Terra y su reciente desplome, aunque cita la reciente "agitación" de los mercados y presta especial atención a las monedas estables.
"A la luz de la reciente agitación en el mercado de criptoactivos, el G7 insta al FSB, en estrecha coordinación con los organismos internacionales de normalización, a avanzar en el rápido desarrollo y aplicación de una regulación coherente y completa de los emisores de criptoactivos y los proveedores de servicios, con el fin de mantener los criptoactivos, incluidas las stablecoins, con las mismas normas que el resto del sistema financiero", emitió el G7 en una declaración.
Las opiniones se producen después de que el mundo cripto sufriera un duro golpe luego del colapso de la stablecoin de Terra, UST y su otra criptomonedas insignia, LUNA.
El documento también enfatizó en la necesidad de implementar un marco regulatorio para las stablecoins, definidas como aquellas criptomonedas que mantienen paridad con otro activo como el dólar.
Sobre este punto, el organismo solicitó que "se refuerce la divulgación y la información reglamentaria, por ejemplo, en lo que respecta a los activos de reserva que respaldan las stablecoins".
El G7 también instó a que se rechacé un proyecto de moneda estable "global", una propuesta parecida a la ideada por el gigante de redes sociales Meta (ex Facebook) con Diem.
"Reafirmamos que ningún proyecto global de stablecoin debe comenzar a funcionar hasta que no aborde adecuadamente los requisitos legales, reglamentarios y de supervisión pertinentes mediante un diseño adecuado y la adhesión a las normas aplicables", aclaró el escrito.
"El G7 mantiene su compromiso con unas normas reguladoras estrictas para las stablecoins globales, siguiendo el principio de misma actividad, mismo riesgo, misma regulación", sintetizó el grupo.
En la Argentina creció el uso de la tecnología cripto para evitar restricciones cambiarias y protegerse de la devaluación creciente.
En lo que respecta a regulaciones específicas a nivel nacional, el hecho que aún no existan, significa que estén prohibidas las transacciones en criptomonedas.
Podemos nombrar los siguientes tratamientos existentes:
Últimamente, salieron a la luz nuevas disposiciones que persiguen desalentar el uso de criptomonedas. Desde noviembre de 2021, el Gobierno aplica el impuesto al cheque a la compraventa de criptomonedas como el Bitcoin.
A principios de marzo de este 2022, se dió la votación en el Senado de la Nación para establecer el acuerdo entre la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda de u$s45.000 millones.
Uno de los puntos claves es que se propone mejorar el sistema de pagos digital en pos de optimizar la economía pero no incluye a las criptomonedas como una alternativa.