Ya es bien sabido que el COVID y el encierro hizo que el ecommerce explote a nivel mundial. Al estar en sus casas todo el día durante el 2020 y parte del 2021, la mayoría de las personas se volcó al comercio electrónico y esta herramienta se convirtió en pieza fundamental para que las economías de la mayoría de los países se mantuvieran a flote.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), uno de los principales órganos de la Organización de las Naciones Unidas, publicó un informe en marzo en el que se destacó el papel que tuvo la pandemia en crear un furor a nivel global de la venta online.
Según el informe confeccionado por la consultora Kantar Insights, la participación del comercio electrónico en el comercio minorista mundial pasó de ser un 14% en 2019 a llegar a aproximadamente el 17% en 2020. Y en ese período, Latinoamérica mostró números asombrosos respecto al ecommerce.
En el primer semestre de 2021, según los datos de la CACE (Cámara Argentina de Comercio Electrónico ) se registró una facturación de 631.788 millones de pesos, representando un crecimiento del 101% en comparación al mismo período de 2020.
Si bien Brasil y México parecen ser los reyes indiscutidos en el sector del comercio electrónico, el crecimiento sorprendente de mercados como Argentina, Chile y Perú muestra que las nuevas costumbres impuestas por la pandemia vinieron para quedarse.
Según Statista Digital Market Outlook, la región alcanzará un valor en ventas por 80.500 millones de dólares en 2021. Y, además, se estima que el sector alcanzará los 105.000 millones de dólares en 2025.
El dato más destacado es el de Argentina, ya que según la publicación se convirtió en "el tercer mercado de la región en función del valor de ventas, registrará la mayor tasa de crecimiento entre los seis principales países, con un alza prevista del 59% entre 2021 y 2025", según un artículo publicado por el sitio Dolarhoy.