El mexicano Grupo Financiero Banorte y la plataforma digital de entregas Rappi anunciaron el martes la creación de una empresa de servicios financieros digitales en la que cada uno tendrá una participación del 50%.
La alianza, sujeta a la aprobación de las autoridades financieras y de competencia, estaría enfocada inicialmente en los clientes de Rappi que, según las empresas, actualmente ahora necesitan más este tipo de aplicaciones digitales debido a la pandemia del coronavirus.
"Esta operación está alineada a la estrategia digital y tecnológica de Banorte en donde, además de proveer servicios bancarios y financieros digitales a sus clientes, (…) busca estar presente (…) y ganar penetración en el sector de servicios financieros digitales", afirmó el grupo financiero en un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores.
Un portavoz de la empresa Rappi dijo a Reuters más tarde que la nueva sociedad con Banorte solo operará en México. Rappi, con oficinas centrales en Colombia, tiene presencia en más de 100 ciudades en nueve países de América Latina.
Banorte, por su parte, dijo que se comprometió a poner a disposición de la nueva sociedad hasta 4,000 millones de pesos (178.6 millones de dólares) en un plazo de 18 meses, de los cuales 3,000 millones de pesos están sujetos a métricas de desempeño.
Banorte es el segundo banco más grande del país y el grupo financiero más grande controlado por accionistas mexicanos.
Grupo Financiero Monex consideró en una nota para inversionistas que esta noticia es "ligeramente positiva" para Banorte, pues puede generar sinergias a nivel del flujo para este proyecto con el que se alía con Rappi.
Los 4 mil millones de pesos mexicanos (más de 178 millones de dólares) que piensa invertir el grupo financiero equivalen al 4.5% del total de sus ingresos por intereses netos en los últimos 12 meses, según Monex, que está haciendo una revisión a sus expectativas de crecimiento, recomendación y precio objetivo de las acciones del banco para finales de 2020.
Las acciones de Banorte tuvieron un ligero incremento de 0.21% ayer martes, antes de que se diera a conocer la alianza con Rappi.
Como una respuesta a la crisis que está enfrentando el país con la pandemia producto del nuevo coronavirus, Rappi inició la entrega de pedidos con robots, de la mano de KiwiBot, una empresa colombiana que presta servicios de entregas con sede principal en los Estados Unidos.
La iniciativa es una prueba piloto que se está llevando a cabo en Medellín. Hasta el momento se han realizado cerca de 120 órdenes al día con 15 robots.
Los robots, que son operados de manera conjunta entre Rappi y KiwiBots, cuentan con capacidad de 35cmX35cmX35cm, y llevan exclusivamente domicilios de restaurantes con pago por medios digitales y en recorridos de última milla.
Las unidades son desinfectadas antes y después de cada una de las órdenes y cuentan, además, con toda la tecnología para funcionar, de manera segura, dentro de las dinámicas de las ciudades.
Felipe Chávez, CEO de KiwiBot, manifestó que "la nueva realidad a la que nos enfrentamos nos hace llevar a pensar en nuevas posibilidades. En KiwiBot, nos alegra poder trabajar con Rappi para brindarles nuestra experiencia y así poder llegar cada vez a más personas con un servicio que aporta a ciudades, comercios y usuarios".
La asignación de una orden a Kiwibot es aleatoria por parte de Rappi. Una vez esto sucede se notifica inmediatamente al usuario y este puede escoger si la quiere recibir o no su domicilio de un robot.
El objetivo de la iniciativa, además de innovar, es hacer entregas de pedidos con el fin de evitar el contacto persona-persona y de esta forma impedir la propagación del COVID-19.
Se tiene previsto que el piloto se lleve a cabo hasta el 8 de julio, y se espera, en un futuro y de acuerdo con los resultados, implementar este nuevo servicio de entrega en las demás ciudades en donde Rappi tiene operación.