YouTube, la plataforma de videos insignia, cumplió 20 años y, durante este período, se convirtió en la red social elegida por muchos usuarios para ver contenido audiovisual.
Para millones de creadores de contenido, el servicio se volvió una vía de ingresos gracias a la posibilidad de monetizar sus canales y generar ganancias diarias.
Sin embargo, en 2025, esta tarea se convirtió en un desafío cada vez más exigente, en línea con el crecimiento exponencial de creadores de contenido y el fortalecimiento de las políticas de calidad de la plataforma.
Con la última actualización del Programa de Socios de YouTube (YPP), los requisitos mínimos para acceder a la monetización fueron elevados, especialmente en lo que respecta a la cantidad de suscriptores y visualizaciones acumuladas.
Para comenzar a generar ingresos, los creadores deben contar con al menos 1.500 suscriptores y acumular 4.000 horas de visualización en los últimos 12 meses.
Además, se exige haber alcanzado 15 millones de vistas en Shorts durante los últimos 90 días, algo que confiere de mayor protagonismo del formato vertical dentro del ecosistema de YouTube.
Otro requisito fundamental es la activación de la doble verificación de seguridad en la cuenta, una medida que apunta a proteger tanto a los creadores como a los usuarios frente a posibles vulnerabilidades.
Desde el 15 de julio de 2025, YouTube también comenzó a priorizar la originalidad del contenido, limitó el uso de herramientas automatizadas y penalizó la reutilización de material sin modificaciones significativas.
Esto implica que los creadores deben demostrar un aporte creativo real en cada publicación y evitar prácticas como el reciclaje de clips virales o la edición superficial de contenido ajeno.
Estos criterios buscan garantizar que los canales monetizados tengan una base sólida de audiencia y produzcan contenido relevante y sostenido en el tiempo.
Más allá de los números, YouTube exige que los canales cumplan con sus políticas comunitarias y de anunciantes, algo que incluye evitar contenido del siguiente tipo:
La plataforma también evalúa la retención de audiencia, es decir, cuánto tiempo permanecen los espectadores viendo los videos, ítem que se volvió un indicador clave para determinar la calidad y el impacto del contenido.
Una vez cumplidos estos requisitos, los creadores pueden solicitar el ingreso al Programa de Socios de YouTube, vincular su cuenta a Google AdSense y comenzar a recibir ingresos por publicidad, membresías, Superchats y otras herramientas de monetización.
Aunque el proceso puede parecer complejo, cada vez más creadores logran alcanzar estos objetivos mediante estrategias de contenido bien planificadas, uso inteligente de Shorts, interacción con la audiencia y optimización de títulos y miniaturas.