A partir de la medianoche de este jueves, choferes agrupados bajo la Unión Tranviarios Automotor (UTA) realizan un paro de colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), lo que obligó a los usuarios a buscar en aplicaciones alternativas para viajar.
Esta medida de fuerza surge tras el descontento del gremio debido a irregularidades en los depósitos de aumentos salariales correspondientes a enero y febrero, los cuales no habrían sido realizados de manera adecuada por cerca de 40 empresas de transporte.
Entre las líneas de colectivos afectadas se encuentran la:
Sin embargo, la empresa DOTA ha anunciado que no se sumará al paro y continuará brindando su servicio de forma normal, siendo esta compañía responsable de aproximadamente 180 líneas de transporte directa o indirectamente en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.
Ante esta situación, la Secretaría de Transporte emitió un comunicado asegurando que los pagos a las líneas de colectivos nacionales están garantizados y próximos a transferirse, abarcando aquellas del 1 al 200. Sin embargo, aclararon que la falta de pago en líneas provinciales depende de la jurisdicción correspondiente.
La Secretaría también advirtió que la medida de fuerza es una decisión unilateral de algunas empresas, quienes son responsables del pago de salarios a sus empleados. En caso de incumplimiento, se tomarán las sanciones correspondientes.
Para quienes tengan la posibilidad de gastar más dinero del habitual -o no tengan otra opción- aplicaciones como Uber o Cabify emergen como opciones para llegar a destino.
En algunos casos este tipo de plataformas se transforma en la única alternativa ante la imposibilidad de tomar otra opción como los trenes por estar abarrotados de usuarios.
A modo de ejemplo, si una persona que se encuentra varada en la zona de la estación Haedo y busca trasladarse hasta Liniers y recurre a Cabify, deberá abonar un monto aproximado de $5.900
En cambio, si el viaje lo inicia desde Sarandí (zona sur del Conurbano) hasta la estación Constitución (destino donde puede tomar el subte para moverse por la Ciudad), el monto en la misma aplicación varía de $5.950 a $6.650, según el servicio que se contrate.
Quienes tengan que trasladarse a Retiro desde San Isidro, el precio puede ir de $7.990 hasta $10.072 en Uber, también de acuerdo al tipo de opción que escoja el usuario.
En esta plataforma el pasajero coloca el punto de origen y el de destino y el precio que está dispuesto a pagar.
Los conductores, por su parte, tienen una lista de pedidos en la que ven las solicitudes que los usuarios van poniendo dentro de su zona en tiempo real y además pueden ver el precio que su contra parte está poniendo y tiene libre elección de decidir cuál de todos los viajes que está viendo elige tomar.
"Suena a que es muy largo pero realmente es una cuestión de segundos porque hemos hecho la aplicación de la manera más sencilla para ambos puntos", explican desde la compañía en diálogo con iProUP.
"Los argentinos son muy dados a proponer. Les gusta mucho hacer las cosas bajo lo que creen y consideran justo entonces nosotros venimos a llenar ese vacío que tenía el país en cuestión de aplicaciones de movilidad", añaden.