Cuando comprimes o estiras un resorte sin romperlo, siempre regresa a su forma original. A esto se le llama resiliencia, que es la capacidad que tiene cualquier cuerpo para sobreponerse al cambio.
Lo mismo debería suceder cuando los emprendedores enfrentan crisis, fracasos o etapas difíciles en el desarrollo de su empresa, una situación que pone a prueba sus habilidades para sacar a flote una compañía si está a punto de sumergirse en el fondo del mar.
Y es que dos de cada 10 empresas de nueva creación sobreviven durante su primer año de creación, las demás fracasan, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Por esta razón, los emprendedores, colaboradores y las organizaciones deben aprender a enfrentar las adversidades, sobreponerse y actuar con inteligencia. ¿Cómo lograrlo? A continuación, Entrepreneur comparte siete tácticas para vencer cualquier dificultad y convertirte en un emprendedor de acero a prueba de balas.
1- Sé flexible con tu modelo de negocio
En su libro “El método Lean Startup”, Eric Ries nos habla acerca de una estrategia basada en la manufactura esbelta del modelo Toyota para la planeación y el desarrollo de proyectos de emprendimiento. El pilar, según Ries, para alcanzar un crecimiento exponencial es la creación de un Producto Mínimo Viable y la iteración hacia una mejora continua tras haber recibido la retroalimentación de los primeros clientes. En este método, el modelo de negocios se puede pivotar en caso necesario hasta lograr construir una propuesta de valor y un plan comercial exitoso. Dicho en otras palabras, debemos deshacernos de todo aquello que no funciona y estar abiertos al desarrollo de nuevas ideas.
2- Prepara un plan B
En el ecosistema emprendedor se dice que si tienes medidas de contingencia es porque seguro estás esperando que pase lo peor y que sólo así te estás preparando para el fracaso. La ausencia de planes de emergencia en caso de que las cosas no marchen como se esperaba, no es para planear la mejor forma de fallar, es para recibir el menor daño posible ante cualquier eventualidad y disminuir el tiempo del ciclo de aprendizaje para resurgir más rápido y fuerte.
3- Mide y actúa
Hablando de mejora continua, todo lo que es medible, se puede superar. El no tener los números de tu negocio es altamente peligroso para su existencia. Tener indicadores de desempeño o KPIs (key performance indicators) es fundamental, pues un tablero de control podrá orientarnos sobre la situación actual en todas las áreas fundamentales de la empresa, logrando así poner en marcha acciones inmediatas para alcanzar los objetivos establecidos.
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5- Innovación inteligente
Si bien es cierto que todas las empresas están obligadas a innovar, pero deben hacerlo bajo un esquema que agregue valor. La innovación no orientada a objetivos puede resultar en desastre para la organización, pues su proceso conlleva el uso de recursos que pueden tener importantes costos de oportunidad. Atrévete a ser disruptivo y a crear algo fuera de serie.
6- Documenta éxitos y fracasos
Se vale equivocarse y fracasar, pero no está permitido no aprender y darse por vencido. El llevar un registro de los puntos clave sobre lo que ha salido bien y mal en la empresa nos ayuda no sólo al desarrollo de mejores prácticas en todos nuestros procesos, sino también a analizar aquello que haya sido desfavorable para evitar los mismos errores en un futuro. Una organización que aprende de sus errores, es una organización inteligente.
7- Busca oportunidades para empezar de nuevo
Peter Thiel, fundador de PayPal, tiene un mensaje muy claro en su libro “De cero a uno”, y es ver el mundo como un lugar lleno de oportunidades. Thiel, sacude algunas de las creencias más arraigadas para hacernos ver que estamos lejos de haber inventado todo lo posible y que sólo aquél que tiene una mentalidad oportunista será quien descubra los secretos que el mundo empresarial esconde para crear compañías como Google, YouTube o Facebook. La organización que busca constantemente abanicos de oportunidades difícilmente fracasará, porque sabe que pase lo que pase siempre existirán otros caminos para llegar a la cima del éxito.