Quienes cuenten con cierto capital y quieran tener su propio negocio, tienen a las franquicias como una gran alternativa de inversión para iniciarse en algún rubro comercial y obtener un rendimiento mensual.
Además, este formato permite apostar por una marca reconocida, que aportará el know-how, capacitación e insumos, entre otros beneficios, sin que haya que empezar de cero y reduciendo el riesgo.
En este sentido, a quienes les interese la venta de comestibles pueden apostar por contratar una franquicia de Frioteka.
Se trata de la red de tiendas de descuento especializada en alimentos congelados más grande del país con 56 sucursales en Entre Ríos, Santa Fé, Córdoba, Buenos Aires, Corrientes, Misiones y Chaco.
Gastón Dall'Armi, Gerente Comercial de Frioteka, afirma a iProUP que cuentan con dos formatos comerciales", a saber:
Sin embargo, este último no está disponible en todos las ciudades, ya que depende de una franquicia madre que la abastezca.
Una vez que el franquiciado tiene el local alquilado y con la instalación eléctrica en funcionamiento, la tienda estará operativa en un plazo de 30 a 45 días.
Desde la compañía ofrecen a un ingeniero que acompaña todo el proceso y además cuentan con acuerdos de proveedores que facilitan el proceso. De hecho, los productos que ofrecen son tanto de marca propia como de aquellas que también se encuentran en el supermercado, aunque con precios y promos diferenciales.
"En la página web de Frioteka se encuentra la información general de la franquicia para quienes estén interesados. Para conocer los detalles del negocio, hay que completar un breve formulario y desde el área comercial nos comunicaremos a la brevedad", asegura Dall'Armi.
"Los niveles de inversión van desde los u$s45.000 a u$s90.000" a valor oficial, señala el ejecutivo de la compañía, quien añade que "la mayoría de nuestras tiendas son operativas con uno a dos empleados por turno".
Con respecto al tiempo de recupero de la inversión, Dall'Armi afirma que es "muy relativo" y depende de cada caso particular.
En este sentido, remarca que registraron "locales que en el primer año con buenos volúmenes de ventas ya dieron la vuelta, se podría decir que recuperaron toda la inversión''.
Sin embargo, advierte, "en algunas plazas ha costado un poco al principio imponer el concepto, pero podemos asegurar que en un promedio de 20 a 30 meses se recupera el capital invertido".
En cuanto a la inversión de la mercadería, Dall'Armi remarca que si bien el monto varía de un mes a otro, "se podría estimar que ronda entre los $7 millones y $9 millones".
"Creemos que nuestra mayor fortaleza es que no es un negocio estacionario, ni tampoco tenemos picos de ventas que nos hagan asumir mayores costos laborales", aclara apunta Dall'Armi.
En este sentido, refuerza que se trata de "un negocio conservador que anda todos los días y todo el año, con costos operativos relativamente bajos y una muy simple administración".
Además, revela que "todos los pedidos de congelados salen de nuestra planta y en forma automática", a la vez que señala que los precios y las promociones son las mismas en todos los puntos de venta y además manejan importes "al consumidor final que son muy difíciles de lograr".
"Podemos decir que nuestra cadena de valor es sólida: todos ganan de punta a punta y el mayor beneficiado es el cliente", concluye.