Si hay algo que dejó claro la pandemia es que hay sistemas que quedaron obsoletos. Hoy, todo se digitaliza, sin importar el sector o industria. De esta forma, los rubros que se escudaron durante años en papeles y procesos burocráticos poco transparentes están quedando paulatinamente atrás.

No hay dudas de que la crisis sanitaria global fue un gran impulsor para muchas empresas. Y, en muchos casos, este tipo de soluciones nacen de inconvenientes personales.

Nicolás Rossi y Diego Espada compraron cada uno un departamento a estrenar hace algunos años. Desde el minuto cero, ambos se involucraron en el consejo de administración para resolver todos los problemas que había, metiéndose de lleno en la actividad de consorcios. Y ahí vieron un dolor real.

"Vimos la falta de herramientas tecnológicas que faciliten la comunicación y el seguimiento de temas de manera ágil", cuenta Rossi a iProUP.

De esta forma, Rossi y Espada decidieron crear su propia empresa y así nació Octavo Piso, un sistema web de gestión de consorcios y barrios cerrados que permite liquidar expensas y sueldos en forma automática, administrar reclamos, pagos, cheques, amenities y vencimientos, entre otros servicios, desde la computadora o celular, desde cualquier lugar del mundo, y está integrado con los sistemas de AFIP, AGIP y otros organismos públicos y privados.

Para convertirse en un verdadero aliado de los administradores, Octavo Piso cuenta con 3 factores que lo diferencian de otras propuestas:

1) Cubren todos los frentes que puede necesitar un administrador, propietario y/o proveedor. Hay soluciones que solo son para propietarios, otras que son solo para administrar, y otras que son solo para control de ingreso. Octavo Piso hace todo eso junto, integrado. "La plataforma permite administrar desde un edificio chico hasta el barrio cerrado más grande y complejo que haya. En ese segmento prácticamente no hay competencia".

2) La tecnología y la arquitectura usada para desarrollar Octavo Piso es la misma que usan las grandes empresas. "Esto nos permite hacer nuevos desarrollos en muy poco tiempo".

3) Tienen soporte personalizado. "Creamos un nuevo concepto para esta industria que es el de ejecutivo de cuenta. Una persona dedicada a cada administración para ser el punto de contacto ante cualquier inquietud. Nada de casillas genéricas de soporte o 0800. La relación con nuestros clientes es muy cercana".

Dolor propio, solución para todos

Para comenzar con el proyecto, los emprendedores desembolsaron u$s20.000 que reunieron de sus ahorros. Todo este dinero se asignó a infraestructura en la nube y publicidad.

"El desarrollo inicial lo hicimos los fundadores, ya que ambos somos ingenieros y apasionados por la tecnología. En ese aspecto pudimos generar un MVP rápidamente y con una inversión baja. Luego la empresa empezó a ser rentable y autosustentable, y no necesitamos mayores inversiones", comenta Rossi .

De esta forma avanzaron y consiguieron su primer cliente, que fue la administración de sus departamentos. "Ellos nos ayudaron mucho a entender el negocio y sobre todo lo que hacía falta, porque nadie quería invertir en mejorar lo que había", agrega el cofundador de Octavo Piso.

Con ese puntapié comenzaron a nuevos clientes, llamando a todas las administraciones que conocían o que veíamos en algún cartel. Tal como lo describe Rossi, fue un "trabajo muy de hormiga".

Hoy, la empresa tiene más de mil administraciones que trabajan con ellos, entre las que encontramos administraciones de edificios, de barrios privados y hasta de guarderías náuticas. Si bien la mayoría está en CABA y PBA, cuentan con clientes en todas las provincias del país. Para fines de 2021 esperan facturar más de $ 30.000.000, de acuerdo a sus proyecciones.

Con la pandemia de por medio, la plataforma logró tener un salto.

"Por un lado empujó a una transformación en la forma de trabajo que nosotros veníamos impulsando hace tiempo, pero que desde el sector por momentos encontrábamos alguna resistencia", comenta Rossi

Y recuerda: "Cuando arrancamos con Octavo la sensación que teníamos era que estábamos adelantados a la época, porque muchos administradores no podían ver el valor que se podía agregar. Hoy es indiscutible. En este sentido a nosotros nos impactó con un incremento en la cantidad de clientes que recibimos semanalmente, prácticamente duplicamos las altas de nuevas administraciones".

Por otro lado, salieron rápidamente a atender nuevas demandas que surgieron cómo la incorporación de asambleas virtuales, nuevos módulos cómo gestión de correspondencia (por el incremento de las compras online), crearon un botón de denuncia por temas de COVID (principalmente para fiestas clandestinas), incorporación de nuevos medios de pagos, entre otros.

Respecto al contexto, los fundadores de Octavo Piso notan que es un sector que se está profesionalizando cada vez más: "Hay que pensar que es un mercado que se mantuvo sin grandes cambios durante más de 20 años, y que hasta antes de la pandemia muchos mandaban las expensas y comunicados en papel. Para las administraciones más grandes, creo que la tendencia que vino para quedarse es la integración de nuevos actores y la integración entre sistemas para automatizar tareas".

De cara a lo que vienen adelantan que están mejorando el módulo de control de ingresos y egresos, para simplificar aún más el proceso, con códigos QR y hasta reconocimiento facial.

"Seguimos trabajando fuerte con las integraciones con otros sistemas, y seguramente pronto tengamos la posibilidad de generar desde Octavo las transferencias bancarias de las órdenes de pago para cerrar ese ecosistema de punta a punta. Estamos con nuestro Octavo Labs trabajando para integración de IoT en barrios privados, cómo por ejemplo para activar luces de canchas cuando haya una reserva en horario nocturno", adelanta y concluye Rossi.

Te puede interesar