Surgió luego de que sus socios fundadores detectaran que en varios países de América Latina existen 22 millones de jóvenes que no trabajan ni estudian
11.01.2019 • 11:28hs • Será en febrero
Será en febrero
Tecnológica argentina que emplea jóvenes de contexto crítico desembarca en Uruguay
Arbusta, una empresa tecnológica argentina creada en 2013 por Federico Seineldin, Paula Cardenau y Emiliano Fazio, prepara su desembarco en Uruguay para febrero de este año.
Se trata de una firma que ofrece servicios de chequeo de calidad de contenido que se sube a Internet y testeo de software y que para llevarlo adelante, emplean a jóvenes de entre 18 y 28 años, sin experiencia y que provengan de un contexto crítico.
Surgió luego de que sus socios fundadores detectaran que en varios países de América Latina existen 22 millones de jóvenes que no trabajan ni estudian pero poseen un fuerte potencial, comentó el exGlobant y actual CEO y socio, Juan Umaran, al diario El País de Uruguay.
Desde 2017 la empresa no paró de crecer. En 2018 facturó u$s1,5 millones y espera cerrar 2019 con ventas por encima de los u$s2,5 millones. Su modelo de negocio captó la atención de grandes corporaciones y entre sus clientes hay multinacionales como Mercado Libre, Disney y Fox Network.
Posee oficinas en Buenos Aires, Rosario y Medellín (Colombia) y emplea cerca de 330 personas, de los cuales más de 70% tienen entre 18 y 25 años y más del 56% son mujeres.
En Uruguay tendrán entre 30 y 40 personas en el primer año. "Están buscando una oportunidad, deseosos de recibir capacitación, un oficio. Es un talento no mirado que Arbusta puede gestionar, dando capacitación tanto técnica como en habilidades blandas con énfasis en gestión de emociones. Y del otro lado está una industria que sufre el problema del pleno empleo. Juntamos ambas realidades en un modelo donde complementamos cómo gestionar y capacitar ese talento con lo que los clientes demandan", aseguró Umaran.
Según el CEO de Arbusta, su llegada al país vecino se da, además de la cercanía, por la disponibilidad de talento con el perfil que busca la empresa. "Detectamos que existen personas sin experiencia laboral ni universitaria pero sí con muchas ganas de trabajar que provienen de un entorno socioeconómico frágil".
A esto se sumó la madurez de la industria del software que exporta a otros mercados y un proceso administrativo tanto para abrir la empresa como para hacer negocios con la región que es muy ágil.
En 2018 facturó u$s1,5 millones y espera cerrar 2019 con u$s2,5 millones. La firma posee oficinas en Buenos Aires, Rosario y Medellín (Colombia) y emplea cerca de 330 personas, de los cuales más de 70% tienen entre 18 y 25 años y más del 56% son mujeres.