"Tengo una idea para un negocio". La frase se repite una y otra vez entre grupos de amigos, colegas de empresas o, en definitiva, personas con ganas de ir por más. Al fin y al cabo, ¿quién no ha soñado con crear un emprendimiento que le asegure un buen pasar?
Pero el camino del emprendedor dista mucho de esa fantasía en la cual, al poco tiempo, llueven los dólares. Tener una buena idea es condición necesaria pero no suficiente. Diseñar un plan de negocios, probar el proyecto con un primer Producto Mínimo Viable (MVP) y salir a testearlo es un camino que debe recorrer indefectiblemente. Y eso requiere de dos cosas: tiempo y plata.
El primer activo se lo encuentra o lo "fabrica": si ya tiene un trabajo, puede continuar con el proyecto en sus tiempos libres. El segundo es más complejo. Si bien se pueden usar ahorros y recurrir al famoso fondo Friends & Family (préstamos de familia y amigos), escalar un proyecto suele demandar una importante inyección de capital.
Un reciente estudio realizado por la Asociación Argentina de Capital Privado (ARCAP) revela en cuadro de situación en Argentina durante el primer semestre:
"Estamos en un punto donde comenzar un startup es mucho más accesible de lo que era antes. Gracias a un mayor acceso a plataformas, conectividad y más usuarios, en este contexto el principal desafío para un startup es escalar su negocio", comenta Mariano Amartino, Managing Director de Microsoft for Startups Latinoamérica.
Sin embargo, María Julia Bearzi, directora ejecutiva de Endeavor agrega: "Lo que sucede en el caso de los emprendedores argentinos es que la constante 'polución' de problemas coyunturales sobre el día a día, la burocracia y el sinfín de vaivenes en las decisiones desde nuestras instituciones, logran desenfocar al emprendedor de esta ardua búsqueda de capital y, de la parte operativa del negocio - ambos elementales para el futuro que cualquier empresa".
Más allá de que la "fiebre startup" está en pleno apogeo, salir a levantar capital para hacer crecer un proyecto tiene sus retos.
Hoy, en la Argentina se pueden encontrar distintos fondos de inversión y empresas referentes que se dedican a analizar todo tipo de iniciativas. Por nombrar algunos:
Estos son algunos de los referentes más importantes en el país y en la región. Cada una de estas compañías tiene sus propias estrategias y sectores especializados en escuchar, buscar y "scoutear" a las mejores startups del mercado, casi como si fueran reclutadores deportivos en busca del próximo crack. Pero no son las únicas.
"Lo que hacemos es invertir en proyectos en diferentes sectores como Fintech, Agtech, ecommerce y mobile commerce, logística, distribución, biotecnología, medioambiente e Internet de las cosas aplicadas a la industria del retail en general", dice a iProUP Gabriela Ruggeri, Managing Partner de Overboost, que gerencia el fondo Kamay Ventures fundado por Coca-Cola y Arcor.
Este fondo busca canalizar entre 100.000 y 300.000 dólares en una decena de proyectos en los próximos tres años. "El programa beneficia a ambas partes, dándoles a cada una lo que necesita para su sostenibilidad y la evolución del negocio. Creemos que la integración entre ambos tiene un enorme potencial", remarca la ejecutiva.
Por el lado de Wayra, la división emprendedora de Telefónica-Movistar, la apuesta es a generar desarrollos en conjunto y hacer escalar la iniciativa a través de nuevos productos y servicios. Con el foco puesto en Big Data, IoT, inteligencia artificial, fintech, video y ciberseguridad, desembolsa más de 250.000 euros por compañía.
"Para ampliar de manera continua las propuestas de soluciones a las necesidades del mercado corporativo y Pymes, Wayra mantiene siempre abierta la búsqueda de firmas innovadoras para poder escalar sus negocios apalancándose en las plataformas de Telefónica", comenta a iProUP Agustín Rotondo, CEO de Wayra Hispam.
Y agrega: "Invertir en desarrollos es una gran forma de encontrar soluciones nuevas para diferenciarse en el mercado y para aportar un valor diferencial a los clientes". Respecto al foco, desde el company builder GridX comentan a iProUP: "Creemos que esta coyuntura puede poner en valor la importancia del conocimiento científico como oportunidad para resolver grandes problemas. Las startups de base científica serán el mejor vehículo para convertir esa ciencia en impacto real".
Al mismo tiempo, referentes de la aceleradora Yavu, que desembolsa hasta u$s100.000 en pequeñas firmas, detallan que en la región –y especialmente en Argentina– hay acceso a profesionales de clase mundial en materia tecnológica: "No tenemos nada que envidiarle a grandes hubs de entrepreneurship a nivel internacional, por eso hay que aprovechar el contexto actual para redefinir y consolidar al país como exportador de innovación".
"Ayudar a gestar desarrollos tiene impacto estratégico y económico: aporta un efecto multiplicador para estar a la vanguardia, un aprendizaje más rápido y profundo y un cambio cultural dentro de la organización, además de contar con otras ventajas competitivas que ayudan en el posicionamiento, acelera los tiempos y procesos de adopción de productos", explica Rotondo.
Este modelo, conocido como Corporate Venturing (CV), gana cada vez más popularidad en el mercado y puede definirse como todo intento de una firma para impulsar nuevas iniciativas en pos de dinamizar sus procesos a través de la colaboración y soluciones de emprendimientos.
"Las corporaciones, por su naturaleza y tamaño, suelen tener estructuras rígidas, burocráticas que hacen que los procesos de cambio e innovación sean complejos", señala a iProUP Maria Julia Bearzi, directora ejecutiva de Endeavor Argentina.
En un reciente estudio realizado por ARCAP, la consultora EY y Endeavor revela que:
"El CV les otorga dinamismo, flexibilidad y tolerancia al fracaso o a equivocarse. Los emprendedores son resilientes, abiertos a la cocreación, a la realización de prototipos y la búsqueda constante de adaptación", confía a iProUP el director ejecutivo de ARCAP, Juan Giner.
Alejado del mundo de las telecomunicaciones y el rubro tecnológico, Quilmes desarrolló Eklos, su propia aceleradora estratégica con el objetivo, en palabras de la empresa, de "facilitar recursos de todo tipo (financieros y humanos) a proyectos claves".
"Uno de los grandes desafíos es seguir siendo relevantes para los consumidores a través de nuestras marcas. Eso solo se puede lograr colocándolos en el centro de la escena para entender cómo evolucionan sus necesidades y desarrollar innovaciones que les brinden soluciones de valor", asegura a iProUP Karin Tenenboim, Gerente de Innovaciónde Eklos en Cervecería y Maltería Quilmes.
Lo propio hace su competidor CCU Argentina. Juan Pablo Barrale, Gerente de Asuntos Corporativos, comenta sobre el potencial que tiene su relación directa con empresas emergente: "Creemos que la innovación surge tanto dentro de la compañía como afuera, es por eso que tenemos dos tipos de programas: Despega, para público interno, e INNPACTA, a nivel externo".
Con los jugadores sobre la mesa, solo resta que los emprendedores consoliden sus ideas, las "bajen a tierra" y salgan a la conquista de los ansiados fondos para desarrollar sus proyectos.