La pandemia dejará muchas lecciones. Y una de las más importantes es que las personas pueden trabajar desde cualquier lugar y en cualquier momento, lo que deja en evidencia que el mundo laboral cambió para siempre.
Sin embargo, este paso no fue sencillo. Según un reciente estudio publicado por Workana, las empresas debieron afrontar diferentes retos para adoptar esta forma de trabajar 100% virtual y los principales desafíos que se manifestaron se resumen en:
En mayor o menor medida, a las compañías no les quedó otra opción y debieron adaptarse al complejo momento.
Pero antes que llegara la pandemia, el mundo del trabajo ya había comenzado a experimentar cambios, con una nueva generación de profesionales que ya no se sienten a gusto con las dinámicas de trabajo burocráticas y poco flexibles.
Esto fue algo que Ignacio Basso y Martín Calzetti experimentaron en primera persona. "Los dos teníamos trabajo que nos gustaban, pero no nos sentíamos cómodos en el vínculo que teníamos con las empresas, que buscaban un desarrollo a 20 años. Entonces nos dimos cuenta que no era solo un problema nuestro, sino que era algo que experimentaban muchos amigos y colegas", comenta Basso a iProUP.
Por eso, decidieron renunciar a sus trabajos y emprender un viaje de tres meses, en el cual aprovecharon para dar vueltas sobre su idea: "Entendimos que esta insatisfacción de las personas, también afectaba a las empresas a la hora de atraer y retener talentos, y nos dimos cuenta que el modelo de trabajo al que estamos acostumbrados se basaba en estas estructuras".
Para cuando volvieron a la Argentina, ya lo tenían decidido: querían evolucionar la forma de trabajar. Así nació Seeds, una plataforma para profesionales independientes y freelancers que busca crear una "comunidad de talentos con experiencias y habilidades validadas" y que quieren vincularse de una forma diferente con el trabajo.
¿Pero qué diferencia a Seeds de cualquier otra plataforma para freelancers? "En otros marketplaces, las personas son expuestas a una compulsa de precios. Lo que termina sucediendo es que el profesional elegido es el que ofrece sus servicios al menor precio", comenta el fundador.
En este punto, su propuesta es diferente: los profesionales se registran en la plataforma, pasan una serie de entrevistas de "reconocimiento" y luego quedan a la espera de un proyecto.
Cuando este aparece, se los convoca dependiendo de sus habilidades y experiencia, y se les pregunta cuánto quieren ganar. Esta propuesta no se rebate, y se le presenta directamente al cliente, sumando el fee de Seeds, lo que genera un ciclo virtuoso y transparente.
Basso detalla que los equipos se estructuran y se arman según las necesidades de las empresas y sus proyectos, dándoles "velocidad y agilidad" en el acceso a talento y flexibilidad en su contratación, gracias a su modelo on demand.
"Nuestro proceso se llama SmarTalent y tiene un algoritmo de matchmaking que además de evaluar las habilidades y la experiencia de las personas, tiene en cuenta sus intereses en cuanto a tipo de proyecto, industria y modalidad de trabajo, por eso es que logramos tener talentos comprometidos que cumplen con los resultados esperados", comenta y agrega: "Con Seeds, una empresa puede tener al equipo que necesita para su proyecto en tan solo 7 días y sin pasar por largos y costosos procesos de reclutamiento".
Este formato de trabajo los llevó a colaborar con gigantes de distintas industrias como Unilever, Coca-Cola, Tenaris, Pernod Ricard, Sancor Seguros y otras grandes empresas nacionales y también en países de Sudamérica (Chile, Colombia) y Centro América. "Generamos la agilidad necesaria para que las empresas puedan operar de manera más eficiente sus negocios, a través de un sistema transparente y a un precio muy competitivo", agrega el Head of Sales.
Para comenzar a trabajar, los fundadores comenzaron a generar una comunidad y ellos mismos tomaron el formato de "Seeder". Con un corto pero efectivo camino recorrido, en 2019 (a tan solo un año de su fundación), la compañía cerró su facturación en u$s 200.000. En lo que va de este año, y con la pandemia de por medio, ya llevan facturados más de u$s 500.000.
"No buscamos maximizar las ganancias, sino que las empresas contraten talento de primer nivel y que los trabajadores ganen lo que quieren. Así velamos por la salud de un ecosistema sano, honesto y coherente", detalla Basso.
Hoy, la firma tiene 500 Seeders en su comunidad y busca seguir incorporando talento, pero sin perder la esencia de los valores que fomentan en su comunidad.
Actualmente, agrupa a sus talentos en distintos hubs: Negocios, Diseño y Producto, Tecnología y Datos, Operaciones y Transformación y Cultura. Los perfiles de Negocios y Tecnología y Datos son los que tienen mayor demanda de trabajo y últimamente se profundizó la demanda de perfiles de Transformación y Cultura.
Según datos de Workana, el mercado freelance creció un 40% desde que comenzó la pandemia. Pero esto responde a un movimiento global: "Esto está recién empezando, el potencial es infinito, esta nueva forma de trabajar va a trascender las fronteras. Todavía hay mucho por hacer".
Por eso, el fundador de Seeds que, de a poco, va a ir evolucionando la forma de trabajar. "Estamos generando un nuevo paradigma, que incluye al actual pero con nuevas posibilidades y entiende que existe una nueva forma de relacionarnos entre personas y empresas de manera tal que la relación sea menos de dependencia y más de beneficio mutuo".
En este nuevo paradigma de trabajo, desde la compañía sostienen que las personas tienen la posibilidad de elegir y de moverse libremente. Al mismo tiempo, creen en la proliferación de organizaciones más ágiles y en personas que se unen para trabajar con propósitos compartidos y con objetivos claros. "El mercado laboral se vuelve más ágil y las habilidades blandas y la capacidad de aprendizaje y adaptación son cada vez más importantes", suma.
Y esto, en un mundo transformado íntegramente por la pandemia se potencia: "Las organizaciones tuvieron que transformarse y, para nosotros, los negocios se aceleraron. El coronavirus adelantó procesos que, en una situación normal -si se puede decir normal- hubiesen sucedido algunos años más adelante".
Por eso Basso confía en su propuesta y arroja: "Las que se transformaron por la pandemia fueron las organizaciones. Tuvieron que pasar por cambios culturales y de procesos lo que despertó nuevas necesidades: trabajo remoto, ágil, flexible, por proyectos. Nosotros en Seeds, ya estábamos preparados para ofrecerles una solución".
Con una propuesta diferente y que busca cuidar a su comunidad de profesionales y a los intereses de las grandes empresas, desde Seeds confían en que van a seguir trabajando con empresas de primer nivel para poder expandirse a toda la región.