El email marketing, el envío de correos electrónicos a una base de datos o contactos, de tus clientes o prospectos, tendrá éxito si y sólo si tu cabeza, el titular, lo que escribís en el "Asunto" tiene el poder de llamar la atención para que lo abran.
Una estrategia de comunicación digital, de marketing directo, aún cuando esté bien planteada, no alcanzará los resultados esperados si nadie lee tus correos, es como si nunca los hubieses enviado, según un artículo del sitio Merca2.0.
Solo hay que imaginar la bandeja de entrada de tu cliente potencial el lunes por la mañana colmada de mensajes. Al pasar su vista por la bandeja de entrada tenés una oportunidad de que se detenga en el tuyo y lo abra, una: o la cabeza que leerá en el Asunto tiene el poder de atrapar su ojo o lo enviará a la fosa común, el Spam.
Es fundamental escribir muy buenas cabezas, titulares, encabezados o como gustes llamarles. Antes de escribir tu correo definí con claridad ¿cuál es el objetivo del mismo y qué deseás que haga quien lo lea? Sin resolver estas preguntas ni lo escribas, no servirá de nada.
Apelá a la curiosidad y escribí una cabeza que provoque interés. Por ejemplo, "Así ahorrarás 50% de energía eléctrica". "Bajá 3 kilos en sólo 15 días, comiendo de todo".
Escribí el beneficio y decí, de entrada, en qué le beneficia lo que le ofrecés. "Sí podés recuperar una espalda sana". "3 formas efectivas para que vendas más".
Utilizá una fecha límite. "Último día para comprar con el 30 por ciento de descuento", "Sólo quedan 2 becas para aprender a vender más". Las personas son altamente sensibles a perderse una oportunidad.
Hacé una pregunta. De preferencia utilizá preguntas cerradas en las cuales la respuesta mental inmediata sea sí o no. "¿Hacés muchas dietas y no consigues bajar de peso?" O preguntas que apelen al interés especial de tu audiencia "Hemos logrado vender más de la meta, ¿por qué no estuviste con nosotros?".
Apelá a los resultados: "Hablá inglés en 5 meses". "Si no te perdona con este regalo, al menos sonreirá".
Comenzá tu texto explicando lo que escribiste en el "Asunto", el porqué dijiste lo que dijiste. Decí con claridad qué deseás que haga la persona que leerá tu correo. Escribí párrafos cortos, de tres líneas como mucho.
Asunto: Cuida a las palabras y ellas cuidarán de tu marca.