Entre los riesgos del trabajo freelance está el no poder optimizar los ritmos y flujos de trabajo desde un lugar remoto, sea en una casa o en un coworking.
Esto no sólo influye en la capacidad laboral, o la satisfacción interna, sino también en la creatividad, una cualidad que necesita irradiarse a todo el el entorno.
En el trabajo de publicidad para marcas hay muchos roles, como formar parte del equipo de producción, y eso se puede desarrollar desde la libertad que ofrece a una profesión en la que no hay que tener miedo a abarcar demasiados terrenos, siempre que el trabajo se haga con dedicación.
Tenemos que salir de nuestra área de confort, estar en constante movimiento, buscar nuevas alternativas y espacios para trabajar. Los profesionales necesitan explorar sus habilidades.
La actividad del freelancer ofrece la posibilidad de moverse en un mercado más amplio, y participar en agencias que requieren estudios, pero sobre todo mucha creatividad.
Acerca de la creatividad y lo que representa como un motor de la actividad freelance se expresa que "al final la actitud que se tenga como freelance es lo que vende, la actitud es la va a percibir el cliente, quien más allá de observar las habilidades o conocimientos de un creativo profesional, va a enfrentarse con las cualidades que la actitud permita revelar".
No siempre la independencia laboral trae consigo múltiples beneficios, sobre todo en el aspecto creativo en el mundo de la publicidad y el marketing.
En 2016, 59 por ciento de los trabajadores independientes de EEUU fueron varones.
En 2017, 43 por ciento de trabajadores independientes declaró que sus amigos y familiares eran la principal fuente de información para encontrar trabajo en EEUU.
El 46% de los trabajadores independientes de tiempo completo mencionó el fondo de emergencia como la razón para ahorrar dinero en 2017.
Pero también se corren riesgos que pueden resultar contraproducentes para tu trabajo y sus buenos resultados.
Toma nota de los siete pecados capitales del freelance:
1.- No organizar tus tiempos de trabajo ni de entrega de resultados.
2.- No ahorrar dinero para los tiempos de pocos clientes.
3.- No hacer tus presupuestos con base en las necesidades reales del proyecto.
4.- Mal pasarte con extensos tiempos de trabajo y pocas horas de descanso.
5.- No alimentarte adecuadamente ni ejercitarte con regularidad.
6.- No conocer a la competencia, sus clientes y sus productos creativos.
7.- No prepararte constantemente ni actualizarte en tu profesión, indicó Merca2.0.