El agro es el sector líder en la adopción de tecnologías con cerca de un 60% de sus inversiones para herramientas tecnológicas, según cifras de la consultora IDC. El uso de tecnología permite modernizar el manejo de la tierra, optimizar recursos y permitir un mayor aprovechamiento del suelo a partir de la integración en los procesos de producción.

Tecnificar y digitalizar el agro permitirá analizar datos e incorporar herramientas como sensores para aumentar la productividad por hectárea en todo el territorio nacional, mejorar la calidad de los productos y mejorar los rendimientos en tiempo y costos.

El IoT proporciona herramientas e información para la toma de decisiones en el desarrollo y producción de los cultivos. A través de un acceso a Internet y a aplicativos móviles se puede aumentar la productividad y rentabilidad a través de la tecnología, optimizando y haciendo un uso eficiente de fertilizantes, pesticidas y riego, para cultivar productos más sanos a menor precio.

El IoT se ha posicionado como una opción para mejorar las condiciones de bienestar de los animales y evitar la propagación de enfermedades patológicas. Con el IoT se involucran tecnologías de detección inteligente asociadas a patrones basados en Big Data, instalando sensores en los criaderos, que capturan y analizan los datos fisiológicos de los cerdos y el entorno de crecimiento.

Este tipo de soluciones permite la tecnificación y automatización de tareas como el monitoreo del ganado porcino a través de aplicaciones móviles y la generación de informes en tiempo real de diferentes variables para prevenir el riesgo de enfermedades y brindar un mejor trato animal.

La modernización del agro traerá mejoras en el empleo y productividad en el sector, y estarán alineados con estándares, protocolos y certificaciones de buenas prácticas globales.

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