Google sufrió mucho por su estrategia de mensajería. Si bien Facebook y Apple han visto que sus plataformas se vuelven indispensables para los usuarios y las empresas por igual, Google ha lanzado una letanía de aplicaciones cuyos nombres concisos (Buzz, Wave, Allo, Hangouts, y la lista continúa) no pudieron salvarlos del basurero del historial de chat.

Pero últimamente parece que el gigante de las búsquedas ha recuperado su cause.

Llegando a RCS

Probablemente ya esté familiarizado con RCS, el nuevo estándar de telecomunicaciones que supuestamente rescatará los mensajes de texto anticuados de la era de los teléfonos móviles. RCS significa Rich Communication Services y viene con características modernas de mensajería como recibos de lectura, indicadores de tipeo y perfiles comerciales verificados. En otras palabras, se ve y se siente como iMessage o WhatsApp, pero funciona a través de la red de su teléfono celular en lugar de Internet, a la SMS.

Durante el último año o dos, Google ha encabezado una campaña para lograr que las empresas de telecomunicaciones y operadores de dispositivos globales respalden a RCS y obstaculicen a sus competidores de mensajería en el proceso. Ahora finalmente está tomando el asunto en sus propias manos.

Los usuarios de Android en Francia y el Reino Unido (y pronto en otros lugares) ahora pueden optar por los servicios RCS proporcionados directamente por Google en lugar de esperar a que su compañía de telecomunicaciones cambie el interruptor. Si bien esto puede parecer un desarrollo menor en la saga RCS de hace una década, en realidad es un "gran cambio de estrategia": no es el equivalente de Google de un servicio de iMessage para usuarios de Android, pero está cerca.

Android paranoico

El gambito de Google resuelve uno de los principales obstáculos para el éxito de RCS, que hasta ahora dependía de los operadores globales y los fabricantes de dispositivos para jugar bien entre ellos. El otro obstáculo es aún más grande. A diferencia de WhatsApp, iMessage y otras aplicaciones de chat basadas en Internet (OTT) como Telegram y Signal, RCS no cuenta con cifrado de extremo a extremo, un hecho con el que Amnistía Internacional arrasó con Google durante los últimos años.

Para los usuarios que se preocupan por la privacidad, el cifrado de extremo a extremo se ha convertido en una apuesta. La buena noticia es que Google finalmente parece entenderlo. Sanaz Ahari, el director de producto responsable de Mensajes de Android, aseguró que está comprometido a encontrar una solución.

Haz tus apuestas (Alpha)

RCS es sólo la mitad de la estrategia de Google para dominar la mensajería B2C. El otro es la mensajería comercial, que la compañía está integrando silenciosamente en Maps y búsqueda, dos áreas donde no hay retraso.

Mientras tanto, como observa Khari Johnson de VentureBeat, la estrategia de mensajería de voz de la compañía es "ubicua e integral", y cuenta con Inteligencia Artificial (Asistente de Google, Google Duplex) y hardware (Google Home) que lo coloca en la parte superior de la clase de conversación.

En opinión de Johnson: Todo esto se suma a un hecho: en cierta medida, Google ya puede haber ganado las guerras de chat, indicó The Next Web.

Te puede interesar