OpenAI anunció un nuevo plan para desarrollar sus propios procesadores junto al fabricante de semiconductores Broadcom.
El objetivo del proyecto es mejorar el rendimiento y la eficiencia de sus sistemas de inteligencia artificial (IA), cómo ChatGPT.
Según detalló la compañía, los nuevos chips estarán integrados en los servidores de sus centros de datos y comenzarán a implementarse a finales del próximo año.
Este tipo de procesadores está diseñado para realizar cálculos específicos de IA mucho más rápido que las CPU tradicionales.
La iniciativa forma parte de una estrategia más amplia de OpenAI para reducir la dependencia de los costosos chips de Nvidia, cuyos modelos dominan actualmente el mercado.
En las últimas semanas, la startup también cerró acuerdos con AMD, Oracle y CoreWeave, y anunció que su chatbot insignia ya cuenta con más de 800 millones de usuarios semanales.
OpenAI apuesta opor sus propios procesadores
Sam Altman, CEO de OpenAI detalló que el desarrollo del chip comenzó hace más de un año y destacó que la colaboración con Broadcom busca "ampliar la capacidad necesaria para empujar los límites de la IA y beneficiar a toda la humanidad".
Por su parte, Broadcom confirmó que ambas empresas desplegarán 10 gigavatios de chips personalizados, una capacidad equivalente al consumo eléctrico de más de 8 millones de hogares estadounidenses.
Con este movimiento, OpenAI se suma a gigantes como Google y Amazon, que también desarrollan procesadores propios para sus sistemas de IA.
Sin embargo, los analistas advirtieron que el desafío no será sencillo ya que proyectos similares de Microsoft y Meta enfrentaron demoras y no lograron igualar el rendimiento de Nvidia.
Aun así, la apuesta de OpenAI busca reforzar una tendencia clave en el sector: el auge de los chips personalizados, un negocio que ya convirtió a Broadcom en una de las grandes ganadoras de la revolución de la IA.
Este proyecto podría marcar un nuevo paso en la carrera por la autosuficiencia en infraestructura de IA, un área cada vez más estratégica en la competencia global entre grandes tecnológicas.