Las ciudades con alta densidad de autos son el caldo de cultivo ideal para las nuevas formas de movilidad, que en la Argentina arrancaron con aplicaciones de viajes con conductor, como Uber y Cabify; y las de alquiler de coches, como Toyota Mobility Services, Awto (junto con Nissan) y MyKeego, entre otras.

En este sentido, en la Capital Federal hay 1,6 millones de vehículos particulares patentados, más del 10% del parque total del país (13 millones), sin contar el transporte público y los coches que provienen del Conurbano diariamente. Es decir, hay un auto cada dos porteños.

Por eso, la capital argentina también está en la mira de las apps de monopatines, ideales para trayectos cortos, de hasta 5 kilómetros, que acaparan gran parte de los viajes de los habitantes de megalópolis como Buenos Aires.

La primera en salir al ruedo fue Grin, una startup mexicana que mantiene una alianza con la app de delivery Rappi. Tras apenas un mes en suelo porteño –más exactamente, el barrio de Palermo– consiguió 5.000 usuarios, quienes ya realizaron 12.000 viajes por un total de 10.000 kilómetros.

No fue la única en ver el negocio: la estadounidense Lime, que arrancó con esta movida en San Francisco, asegura que Buenos Aires tiene las "características correctas" para implementar este servicio y que podrían hacerlo en las próximas seis semanas. De hecho, la firma ya opera en México, Brasil y Uruguay.

Y espera llegar a la Argentina luego de que el gobierno porteño haya reglamentado la ley que establece el monopatín eléctrico como "vehículo de uso personal" y prevé las siguientes cuestiones:

- La edad mínima para circular será 16 años

- Podrán utilizarse las bicisendas y ciclovías

- Los rodados deberán incluir luces delanteras y traseras

- También deberán contar con frenos y bocina

- Estará prohibido desplazarse sin casco o unido a otro transporte

- La velocidad máxima será 25 km/h

Pero, silenciosamente, hay otro jugador global que está ultimando los detalles para aterrizar en la Argentina. Se trata de Movo, del holding español Maxi Mobility, que reúne bajo su paraguas a dos apps conocidas por los argentinos: Cabify, de viajes con conductor; y Glovo; y la de delivery de productos.

La firma promete no sólo desplegar estos rodados en la Capital Federal, sino en otras ciudades del Interior, en las próximas semanas. Y para ello diseñó un ambicioso plan para ser el rey de la movilidad en el país.

En sus marcas

Así como Cabify aterrizó en la Argentina bajo la premisa de respetar la legislación local y evitar los problemas legales que experimentó Uber, Movo sigue los mismos pasos y ya se encuentra realizando los primeros tests en la calle bajo la supervisión de la Secretaría de Transporte porteña

"Estamos probando el sistema operativo y el monopatín. Este período de pruebas durará hasta que sea publicada la regulación por el Gobierno de la Ciudad y podamos lanzar el servicio", afirma en exclusiva a iProUP Guilherme Spinace, responsable de Expansión Global de Movo.

De acuerdo con el directivo, el Ejecutivo porteño escuchó las propuestas de la firma para el armado de la legislación, por lo que están esperando el OK oficial para avanzar.

"Lo que te puedo adelantar es un primer momento se lanzarán en microcentro, Recoleta y Palermo", indica el directivo, quien añade que están en negociaciones con otras dos ciudades del Interior que prefiere no revelar por temas de competencia.

No obstante, los usuarios ya pueden descargar la aplicación de Glovo para poder alquilar los monopatines ni bien esté disponible el servicio y verán activada la zona de Retiro, microcentro y parte de Puerto Madero. Además, tiene publicados los precios para la Argentina, los cuales son similares que los ofrecidos actualmente por Grin:

- Desbloqueo: $15

- Por minuto: $8

- Penalización por circular fuera de la zona: $1.100

Por estas horas, el equipo de ventas de Movo está recorriendo los locales porteños para contratar puntos de retiro y devolución privados, como cafés, restaurantes, kioscos y otros negocios. Así, los comerciantes aumentarán la visibilidad de los monopatines, pero también conseguirán mayor tráfico de potenciales clientes.

Lo que viene

Uno de los principales diferenciales que tiene el ecosistema de Maxi Mobility es la integración de sus aplicaciones, que buscan acaparar todo el espectro de servicios de la nueva movilidad.

En efecto, la capilaridad que tienen marcas como Glovo o Cabify serán aprovechadas por Movo para poder ampliar rápidamente su base de usuarios. Se trata de una estrategia que ya utilizó en otros países de la región y que también aprovechará en la Argentina.

"Desde la aplicación de Cabify, podrás desbloquear un monopatín y usarlo. Lo que entendemos es que potencializará nuestra misión: impactar", revela Spinace a iProUP, quien confía que por estas horas están definiendo cuál será el rango horario en el que el servicio estará activo.

"En un primer momento no funcionarán las 24 horas. Arrancaríamos entre las 6 o 7 y terminamos en 20 o 22. Y operaremos los 7 días de la semana", señala el ejecutivo, quien añade que un diferencial que tendrán será el contacto de personal de la firma con los usuarios,

Em este punto, completa que "la carga no será sólo durante la noche, sino que personas de nuestro equipo estarán durante el día reubicando, reorganizando y atendiendo las denuncias de monopatines mal estacionados".

El otro diferencial consistirá en ampliar sus servicios más allá de los monopatines, como ocurre en España, donde también es posible alquilar ciclomotores eléctricos.

 "Movo no es solo una empresa de scooter sharing, somos una plataforma multimodal de activos compartidos. Iniciamos con las motos en Madrid y traeremos este modelo a Latinoamérica. Ya estamos haciendo pruebas de bicicletas eléctricas, en Chile, un piloto, en Santiago", explica a iProUP.

Claro que para esto, el ejecutivo revela que debe existir una regulación que contemple a estos rodados. "Es posible tener un ecosistema que reciba a las motos, pero tiene estar siempre bien hablado con los gobiernos", adelanta Spinace.

La alternativa argentina

En 2015, los hermanos Sergio y Christian Gudalewicz comenzaron a representar localmente a varias empresas de monopatines, entre ellas, a AirWheels, una de las más importantes a nivel global. Con el know-how adquirido, ya poseen su propia marca, Voltion, y quieren participar del negocio de alquiler de estos rodados.

"Representamos a varias empresas de monopatines. Dos de ellas ofrecen el servicio de alquiler, el sistema y la aplicación. La idea nuestra era ir hacia el alquiler y, con el proyecto del gobierno porteño, nos pareció una buena oportunidad para lanzarlo", asegura Sergio Gudalewicz, director general de Voltion, a iProUP.

La compañía ya está comercializando su marca propia y para mitad de este año lanzarán su modelo "propio", es decir, diseñado internamente.

A diferencia del resto de los jugadores globales, Voltion tiene un argumento de peso para conseguir su lugar en la prueba piloto que lanzará la Ciudad: integración de trabajo argentino, tanto a nivel de construcción como del software.

"Nuestro proyecto es lanzar un producto nacional. Estamos trabajando con una empresa de Bahía Blanca para desarrollar la aplicación. E instalaremos una planta de ensamblaje en el Distrito Tecnológico de Parque Patricios", anticipa Gudalewicz a iProUP.

La empresa ya tiene experiencia en alquileres de estos rodados: ya está trabajando con Segways (monopatines que poseen las ruedas a los costados) y monopatines eléctricos a través de city tours para turistas extranjeros en la Ciudad de Buenos Aires.

Este antecedente les permitió superar una "curva" que retrasa a varias empresas del sector, como son los seguros, ya que no hay muchas compañías que ofrezcan pólizas específicas para este tipo de vehículos. En su caso, trabajan con Swiss Medical Group.

Gudalewicz asegura que al dedicarse a la venta y diseño de estos equipos, cuentan con otro diferencial: la confiabilidad en sus equipos, ya que existen muchos genéricos de baja calidad. "Ofrecemos la venta, posventa y service. Y nuestro servicio técnico hasta recibe consultas de vehículos de otras marcas", añade el directivo.

Pero otras comunicaciones telefónicas que atienden diariamente confirman cómo aumentó el interés de los argentinos en los vehículos. "Pasamos de unos pocos llamados a más de 300 por mes", confía en diálogo con iProUP.

Con Grin ya funcionando, Lime con planes de hacerlo, Voltion desarrollando el servicio y Movo esperando en la línea de largada, la nuevas formas de transporte se convierten en algo cotidiano para la ciudad de Buenos Aires.

Sólo resta que los porteños comiencen a utilizarlos para sus viajes diarios y esperar, al menos en algunos barrios, que la movilidad 4.0 reemplace al ruidoso, contaminante y atestado tránsito a los que nos tiene acostumbrados la Capital Federal.

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