La señal de WiFi suele fallar en algunos rincones de la casa, con cortes o lentitud que arruinan la experiencia al navegar, ver videos o hacer videollamadas. Muchas veces el problema no está en la velocidad contratada, sino en cómo está configurado el módem.

Específicamente, hay un ajuste muy fácil de hacer desde cualquier navegador, sin instalar nada ni llamar a un técnico, que puede mejorar la conexión en todos los dispositivos y en toda la casa. Así evitás tener que comprar repetidores o cambiar el plan de internet.

El problema de los protocolos viejos

Los routers modernos admiten distintos protocolos de conexión inalámbrica. Estos protocolos fueron evolucionando con los años: los más antiguos, como el 802.11b o 802.11g, quedaron superados por versiones mucho más rápidas y eficientes, como WiFi 4, 5 y 6.

Sin embargo, en muchos hogares todavía están habilitados esos protocolos viejos, y eso genera un cuello de botella: si hay un solo equipo conectado —una notebook vieja, una TV antigua o incluso un celular desactualizado— que usa una tecnología vieja, toda la red se adapta a su ritmo más lento.

Eso hace que la conexión se degrade para todos, aunque los demás dispositivos sí soporten velocidades superiores.

Cómo ajustar la configuración y mejorar la red

El proceso es simple y no requiere conocimientos técnicos. Solo necesitás estar conectado al WiFi y abrir cualquier navegador (Google Chrome, Firefox, Safari). Estos son los pasos:

Llevar a cabo estos simples pasos puede hacer que la velocidad, la estabilidad y el alcance del WiFi dentro de la casa, mejoren abruptamente, especialmente si hay varios dispositivos conectados al mismo tiempo.

La ubicación del modem: otro factor a tener en cuenta

Además de la configuración interna, que es sin lugar a dudas lo más importante, la ubicación física del módem dentro del hogar puede afectar de forma directa la calidad de la señal WiFi.

Aunque muchas veces se instala cerca de una pared o detrás del televisor por una cuestión de comodidad, lo ideal es colocar el equipo en una zona central, elevada y libre de obstáculos.

Los muebles grandes, las paredes gruesas y los electrodomésticos como microondas, parlantes Bluetooth o teléfonos inalámbricos pueden interferir con la señal.

Lo más recomendable es ubicar el módem en una superficie despejada, a la vista, y evitar que esté cerca de otros dispositivos que emitan ondas o calor.

En el caso de vivir en una casa de más de una planta o con muchas divisiones, este punto es clave para evitar zonas sin cobertura o con conexión débil.

En algunos casos, puede ser útil activar la red de 5 GHz para aprovechar mejor la velocidad en espacios cercanos, y dejar la de 2.4 GHz para los ambientes más alejados.

Te puede interesar