La IA está llevando las estafas digitales a otro nivel: mensajes más personalizados y convincentes que son difíciles de identificar. Cómo evitar caer
31.07.2025 • 13:06hs • Ciberseguridad
Ciberseguridad
Cuidado con esta estafa: es la más fácil de creer y la más peligrosa de 2025
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La inteligencia artificial no solo impulsa avances tecnológicos: también se convirtió en la aliada de los ciberdelincuentes para hacer estafas cada vez más creíbles y difíciles de detectar.
Los engaños ya no se limitan a mensajes genéricos o mails con errores ortográficos; ahora, gracias a la IA, los ataques se personalizan para engañar a cada víctima con mensajes creíbles y adaptados a su contexto.
Este tipo de fraude, que expertos definen como la estafa "más fácil de creer y más difícil de detectar", se basa en aprovechar datos personales y técnicas de ingeniería social mejoradas con modelos de inteligencia artificial para crear mensajes que parecen genuinos, incluso cuando buscan robar datos o dinero.
Cómo funciona esta estafa
Los atacantes recopilan información sobre la víctima: nombres, relaciones, hábitos y hasta detalles específicos de su día a día, que pueden obtener de redes sociales o filtraciones de datos.
Con esa información, y utilizando herramientas de inteligencia artificial, generan mensajes personalizados que simulan comunicaciones reales, ya sea a través de correos, mensajes de texto o aplicaciones de mensajería instantánea.
El resultado son mensajes convincentes que apelan a la confianza y a la urgencia, como un pedido de ayuda de un familiar en apuros o una notificación urgente de un servicio conocido. Así, la víctima baja la guardia y termina entregando información sensible o realizando transferencias que no debería.
Por qué es tan difícil detectarla
A diferencia de las estafas clásicas, que suelen mostrar señales claras como errores ortográficos, remitentes dudosos o links sospechosos, estas nuevas estafas son casi perfectas.
La personalización que brinda la IA hace que el contenido parezca legítimo y familiar, lo que dificulta que la víctima identifique la trampa.
Además, el mensaje suele estar acompañado de una historia creíble y emociones que generan presión, como la urgencia, el miedo o la empatía, haciendo que reaccionar sin pensar sea casi automático.
Consejos para protegerse
Aunque el panorama es desafiante, existen estrategias para evitar caer en estas trampas.
En primer lugar, desconfiar de cualquier pedido urgente, incluso si proviene de alguien conocido. Confirmar la información por otros medios —una llamada, un mensaje distinto o una videollamada— puede evitar pérdidas.
Aunque la inteligencia artificial potencia a los hackers para crear estafas cada vez más sofisticadas, también puede ser una gran aliada para defenderse. Herramientas basadas en IA permiten analizar mensajes y detectar señales de fraude, ayudándote a identificar engaños antes de tomar decisiones riesgosas.
Por eso, usar la tecnología con cuidado y conocimiento puede marcar la diferencia entre caer o evitar un fraude.
Finalmente, mantener buenos hábitos de seguridad digital, como no compartir información sensible en redes sociales, actualizar contraseñas y activar la autenticación en dos pasos, fortalece la defensa contra estos fraudes.
