Una familia de Buenos Aires instaló paneles solares en su hogar y logró generar suficiente electricidad para sustentar su hogar y comenzar a vender su excedente a la ciudad.
Esto fue posible gracias a la instalación de 12 paneles solares con una potencia de 3.8 kilowatts. Además, fueron los primeros en iniciar el trámite para pedir que se les coloque un medidor bidireccional, no solo lo que consumen sino el excedente que inyectan en la red.
Como explica La Nación, la Ciudad de Buenos Aires está atrasada en materia de generación residencial de electricidad a partir de energía renovables. La provincia que pica en punta es Santa Fe, la más avanzada en reglamentación y créditos para impulsar la instalación de equipos.
En noviembre pasado, el Gobierno implementó la ley 27.424, llamada Régimen de Fomento a la Generación Distribuida de Energía Renovable Integrada a la Red Eléctrica Pública, para usuarios residenciales y pymes. Varios provincias que no tenían una normativa al respecto implementaron la ley nacional, como es el caso de Buenos Aires. Otros provincias, como Mendoza, Córdoba y Salta, por ejemplo, ya contaban con su propia reglamentación.
"Una casa promedio de clase media consume 600kW/h. Para bajar a la mitad la factura de luz, que puede estar costando $5000, se necesita una inversión de $150.000 en paneles e instalación. No es menor la inversión, pero además de que se repaga con los años, se reduce el dióxido de carbono que genera una planta de gas", dice Ricardo Pizarro, dueño de los paneles junto con su esposa Eugenia.