Esta tendencia demuestra la búsqueda de soluciones más flexibles y adaptadas a los usuario. El país ya posee un millón de cajas disponibles
23.04.2025 • 15:15hs • Economía nacional
Economía nacional
Aumento en la demanda de cajas de seguridad no bancarias en Argentina por desconfianza al sistema
El mercado de cajas de seguridad no bancarias mostró un crecimiento exponencial por la integración de tecnología avanzada. Se estima que la Argentina posee un millón de unidades de cajas disponibles.
Este movimiento demuestra una nueva tendencia hacía soluciones más flexibles y adaptadas a las necesidades del usuario.
Según la Asociación de Bancos de Argentina, el 75% de los argentinos opta por guardar sus ahorros y valores por fuera del sistema bancario tradicional.
Esta tendencia se debe a la creciente desconfianza hacia los bancos tradicionales y por la reducción en la oferta de cajas de seguridad debido al cierre de sucursales en los últimos tiempos.
Ante esto, los bancos atraviesan una gran problemática ya que su disponibilidad de cajas es menor al 10% de su capacidad total.
Una de las principales limitaciones para los usuarios es que el acceso a las cajas de seguridad bancarizadas está restringido al horario de atención del banco.
Nuevos desafíos para el mercado de cajas de seguridad argentinos
Para responder a esta dificultad, las empresas de cajas de seguridad propusieron un esquema de atención al cliente extendida de lunes a sábado, además garantizaron discreción en el ingreso y egreso de las sucursales.
Las compañías dentro del mercado que brindan el servicio de cajas de seguridad, intentan sumar distintas prestaciones y tecnologías.
Su objetivo es brindar mayor comodidad y protección a los clientes ante nuevas amenazas, tendencias y necesidades del mercado para así atraer nuevos usuarios al mercado.
Con respecto a los valores, alquilar una caja de seguridad privada tiene un costo mensual de $40.500. Como referencia, una caja chica puede guardar hasta u$s50.000 y una de mayor valor permite guardar otros tipos de objetos como documentos y escrituras.
Según los especialistas, una de las principales ventajas de optar por una caja de seguridad no bancaria es su discreción, algo que protege la privacidad del cliente.
Este tipo de transacciones se realizan en un entorno donde no se evidencia la naturaleza de los bienes o valores manejados. Además son menos los requisitos que se le exigen a los usuarios para contratarlas ya que son inmediatas y por vía telefónica.