Los estafadores actuales utilizan métodos más sofisticados, como robots ágiles, para cometer fraudes de pago cada vez más complejos, dificultando su detección y costando a las empresas casi u$s30 mil millones al año.
Las vulnerabilidades recién descubiertas se comprometen con más frecuencia, y aumentan los costos rápidamente.
El costo del fraude en servicios financieros creció entre 6,7% y 9,9% más respecto a la etapa anterior a la pandemia, con una pérdida de hasta u$s4 por cada dólar de fraude, en comparación con u$s3,25 en 2019.
Se proyecta un aumento de 20% en transacciones fraudulentas con tarjetas de pago, para alcanzar los u$s38.500 millones en 2027.
Los principales tipos de fraude incluyen:
Arianne Rohan, ingeniera cibernética y arquitecta de soluciones empresariales de Galileo Financial Technologies, enfatizó la necesidad de defensas sólidas y estrategias de adaptación para proteger el sistema financiero contra estas amenazas, instando a la innovación y colaboración constante.
Según un estudio de EY, en 2022, el 42% de las personas con acceso a pagos digitales fueron víctimas de fraude, mientras que el 40% desconoce cómo protegerse y el 60% carece de un plan de respuesta a incidentes de seguridad.
Los expertos puntualizaron que los robos, fraudes y estafas con tarjetas de crédito facturaron mundialmente u$s33.000 millones en 2021, aumentando a u$s36.000 millones en 2022.
En la Argentina, las búsquedas relacionadas con la seguridad online aumentaron 20% en 2022, con consultas específicas sobre administradores de contraseñas triplicando su volumen, y reflejaron un creciente interés en mitigar riesgos de fraude.
La prevención moderna del fraude requiere una detección temprana, consistente y rápida, con un enfoque de múltiples niveles para reducir pérdidas y minimizar riesgos de pago.
Según Tory Jackson, director de estrategia y desarrollo empresarial para América Latina, la prevención eficaz del fraude exige analizar múltiples datos simultáneamente en tiempo real, y las plataformas convencionales podrían obstaculizar este proceso esencial.
Jackson recomienda adoptar un enfoque holístico en cada etapa de la transacción para combatir el fraude de manera integral.
Para una prevención efectiva del fraude, es esencial buscar soluciones adaptadas que se ajusten al perfil de riesgo y transacción de su empresa.
Un socio confiable debe ofrecer servicios proactivos ágiles para abordar los riesgos de fraude específicos de sus productos y programas.
"Reconociendo las complejidades inherentes al ecosistema de fraude y riesgo de pagos, un socio confiable debe proporcionar un conjunto ágil de servicios proactivos de mitigación de fraude meticulosamente elaborados", sumó Tory Jackson.
Un enfoque futuro implica buscar soluciones de múltiples capas que brinden protección integral contra el fraude y el riesgo. Es importante priorizar tecnologías que puedan evolucionar inteligentemente con el tiempo.
Una estrategia holística y personalizada es esencial para abordar los servicios de fraude de pagos de extremo a extremo. Una plataforma moderna debe manejar hábilmente el fraude operativo y transaccional, superando a los sistemas heredados.