Antes de responder la pregunta del título, es decir cómo sé si mi teléfono Samsung o Motorola cuentan con la tecnología NFC (Near Field Communication), es conveniente saber qué es la tenología NFC.
Se trata de una tecnología de comunicación inalámbrica de corto alcance (el radio de alcance es de 15 centímetros) y alta frecuencia, por lo que los celulares tienen que estar muy cerca.
La función es clave: en los dispositivos móviles, puede utilizarse para sincronizar dispositivos, compartir datos entre sí, automatizar acciones y realizar transacciones móviles.
No tenemos que hacer nada extra para que funcione. Solo hay que colocar el teléfono a unos pocos centímetros de otro dispositivo NFC, el que debería detectarlo inmediatamente y ya está listo para funcionar.
La mayoría de los teléfonos inteligentes que están disponibles en el mercado hoy cuentan con NFC debido a que se viene desarrollando desde hace varios años.
Sin embargo, son los últimos modelos los que cuentan con las últimas actualizaciones y capacidades de la tecnología NFC. Solo los teléfonos con sistema operativo Android 4.3 tendrán las últimas funciones de seguridad de NFC.
Casi todos los modelos de gama media y alta de Samsung, sobre todo aquellos fabricados en los últimos seis años, tienen la tecnología NFC.
Algunas de las series que Samsung que tienen NFC son:
Si tenés un teléfono Samsung fabricado en los últimos seis años, es probable que cuente con NFC. No obstante, existen diversas formas de verificar si tu dispositivo efectivamente dispone de esta tecnología.
En primer lugar, podés buscar el logo de NFC en el propio teléfono o en la caja del mismo. Normalmente, estos logos suelen estar a la vista, lo que facilita su identificación.
Si no encontás el logo de NFC, otra forma de confirmar si tu teléfono Samsung está equipado con esta tecnología es acceder al panel de ajustes rápidos del dispositivo. Al hacerlo, se mostrarán varias opciones rápidas para activar o desactivar funciones como el WiFi, y es posible que también encontés allí la opción de NFC.
Por último, podés buscar directamente en la configuración del teléfono. Accedé a los ajustes del dispositivo y utilizá la función de búsqueda para buscar las siglas "NFC".
La tecnología NFC, al igual que otras características de tu teléfono, opera en segundo plano de manera silenciosa hasta que se necesita. Sin embargo, también puede utilizarse para desbloquear una amplia gama de funciones útiles que pueden simplificar tu vida.
Si alguna vez has utilizado Samsung Pay, ya has aprovechado la función NFC de tu teléfono. No obstante, NFC puede ofrecer mucho más que simples pagos móviles.
Es importante destacar que NFC es principalmente una tecnología pasiva. Consume una cantidad mínima e insignificante de energía de la batería y no realiza ningún procesamiento a menos que esté interactuando activamente con otro dispositivo NFC. Además, en términos de privacidad, no transmite ningún dato personal a menos que otorgues una autorización explícita, y las transacciones, como los pagos móviles, están totalmente cifradas, lo que garantiza la seguridad de tus datos.
Por el lado de Motorola, estos son algunos de los modelos que cuentan con esta tecnología:
El procedimiento más sencillo para saberlo es entrar en los ajustes del teléfono y buscar la función "NFC". No hace falta que entrés en todos los apartados, basta con introducir el término en el buscador que suele aparecer en la parte superior de la app.
Otra opción para saber si tu móvil Motorola tiene NFC es utilizar la aplicación Check NFC, de descarga gratuita en Google Play Store. Cuando esté instalada, solo tendrás que abrirla para comprobar la información.
Si tu celular no tiene esta tecnología, podés recurrir a las pegatinas NFC. Algunas entidades bancarias disponen de ellas, por lo que podés preguntar a tu banco si es posible conseguir una para tu terminal.
Una vez la tengas en tu celular solo tenés que acercarlo a un lector NFC para empezar a pagar con ella cuando quieras. Esta pegatina estará asociada a tu cuenta como si fuera una tarjeta de crédito más.
Otra opción es adquirir un dispositivo NFC externo. Aunque no son muy grandes, sí pueden resultar algo aparatosos. Solo tendrás que configurarlo y en pocos minutos podrás empezar a usarlo donde quieras