Cuando todo va mal, las cosas pueden ir todavía peor. Es una de las leyes de Murphy que el empresariado argentino lleva tatuada, porque a las dificultades de pilotear una empresa en el país se suman cada día nuevos obstáculos.
Uno de ellos es la falta de actualización desde abril del Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRASE), que pega de lleno en el sector del conocimiento, tercer complejo exportador con u$s7.000 millones anuales. Es que un gran número de firmas no está pudiendo renovar servicios clave del exterior.
Guillermo del Castillo, ejecutivo de Snoop Consulting, señala a iProUP que el cerrojo importador están afectando a las empresas del conocimiento de varias maneras:
Sobre esto último, del Castillo remarca que las compañías "partners" que revenden licencias, no pueden trabajar con precios certeros: cobran en pesos los servicios vendidos a sus clientes, sin haber girado el pago en dólares al exterior ni saber a qué tipo de cambio lo harán.
"La situación es desastrosa", confiesa a iProUP Adrián Simonovich, CEO de Sia Interactive, que tiene todas sus soluciones montadas en Azure, nube de Microsoft. Ante la dificultad de acceder a divisas, en un año dejaron de contratar directamente a Microsoft y cambiaron tres veces de revendedor.
"La nube es tan crítica como la luz y el agua. Es increíble que algo que debería ser súper estable esté en riesgo. Ahora, tenemos el servicio a través de Telecom y nos cobra prácticamente a valor blue: dólar oficial más un 100%", remarca.
Y advierte: "Si noy hay cambios, deberemos buscar la forma de pagar en EEUU: si nos apagan Azure, caen todos los clientes y desaparecemos como empresa".
La Cámara Argentina de Internet (CABASE) alerta sobre "la crítica situación, principalmente en Pymes y cooperativas, por la acumulación de medidas y regulaciones que impactan negativamente en su sostenibilidad".
Una es la imposibilidad de acceso a divisas para abonar servicios y equipos clave para el funcionamiento de redes, por lo que podría faltar Internet en el país.
Ariel Graizer, presidente de CABASE, indica a iProUP que las trabas a las importaciones afectan a los proveedores de servicios de Internet (ISP) de dos maneras:
"Hay aplicaciones que compran los ISP, como software de mantenimiento e instalación de equipos que, si dejan de pagar, se cortan. Si un equipo se daña o deja de funcionar, no tiene soporte de ningún tipo", advierte Graizer.
Remarca que muchas prestaciones que se interrumpirán por falta de pago son especializadas y solo las brindan empresas radicadas en el exterior, como servicios en la nube, streaming, hosting, roaming internacional o landings rights (derechos de aterrizaje) para que los satélites puedan comercializar el uso de su señal fuera del país.
"Muchos proveedores están exigiendo ya mismo la cancelación de deudas trabadas", completa del Castillo. En ese sentido, circula una solicitada de Licencias OnLine, que comercializa soluciones de software y cloud computing, comunicando que Microsoft ya no aceptará altas de clientes ni renovaciones de suscripciones por vencer.
"Las más perjudicadas son empresas pequeñas y medianas, que no tienen casas en otros países desde donde girar. Si recurren al dólar bolsa, pierden el acceso al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) por 180 días, y usar divisa propia tampoco asegura la aprobación de las SIRA", opina del Castillo.
Esto genera que las compañías que no pueden renovar sus licencias estén obligadas a utilizar software obsoleto o menos seguro, lo que afecta su productividad.
Norberto Capellán, presidente de la Cámara de Informática y Comunicaciones de la República Argentina (CICOMRA), resalta a iProUP que la situación afecta a la cadena de valor de las aplicaciones de software licenciado, tanto a empresas que lo utilizan como a las que lo proveen.
Para el directivo. "la extensión en el tiempo de estas restricciones ocasiona graves problemas, ante la imposibilidad de pago de licencias e impedimento de su utilización".
"Desde la cámara estamos alertando sobre la situación y los riesgos que implica para la continuidad de la prestación de servicios clave, como también el impacto de las exportaciones de un sector tan importante como la Economía del Conocimiento".
Según la Cámara Argentina de Software (CESSI), el gasto promedio en software de una firma local son u$s100.000 al año. Sin embargo, la suma varía significativamente según el tamaño y el rubro, dice Del Castillo. En el caso particular de Sia Interactive, Simonovich explica que gastan en promedio unos u$s15.000 al mes.
La situación es verdaderamente compleja. Son montos corporativos que no se resuelven fácilmente pagando con tarjeta como si fuese una suscripción de Netflix o Spotify.
Sebastián Domínguez, CEO de SDC Asesores Tributarios, revela a iProUP algunas de las dificultades que encuentran las empresas con los pagos al exterior:
Sin embargo, existen alternativas para salir de este callejón sin salida:
"Decenas de empresas que comercializan licencias del exterior y revenden en pesos al oficial, no pudieron girar y les llegó el Impuesto PAÍS a través de Comercio Exterior y luego la devaluación post-PASO. No saben cómo seguir", advierte.
"La situación es muy dramática y golpea durísimo. Soy el CEO de la empresa y en vez de estar viendo cómo vender más estoy pensando cómo pagar una factura", concluye Simonovich.