El simracing o automovilismo virtual, es una disciplina que ya lleva varios varios años en el país y en la que se se destacan pilotos de alto nivel. Su crecimiento viene de la mano del impulso que adquirieron los eSports en general. Actualmente, cada vez más empresas entienden que este es el camino para llegar a grupos segmentados de audiencias.
Durante la pandemia, cuando las carreras físicas se suspendieron, el Turismo Carretera y el Súper TC2000, las categorías más populares del país, encontraron en los eSports el soporte ideal para mantener vivos a pilotos, patrocinadores y fanáticos.
Desde eMotorEsports, con el apoyo de ACTC, crearon los campeonatos TC y TC Pick Up, donde participaron pilotos profesionales que corrieron desde sus casas con simuladores de manejo.
El éxito de las carreras, que se emitieron en la televisión abierta, se vio reflejado en los picos de rating que superaron los niveles de audiencia de una carrera normal.
"En la actualidad, contamos con más de 400 gamers en etapa de clasificación, más de 140 gamers en campeonatos y más de 70 programas producidos", expresa a iProUP Diego Hurtado, director de Marketing y Comunicación de eMotorSpots Argentina, en diálogo con iProUP.
Los eSports son una industria en pleno crecimiento. De hecho, de acuerdo con un informe de la consultora Newzoo (2022), se espera que para 2025 la cantidad de entusiastas ascienda a 318 millones y la audiencia total alcance los 640 millones de espectadores a nivel mundial en menos de diez años.
"A nivel regional, Argentina es el tercer mercado más importante de esports, detrás de México y Brasil: según la Asociación de Deportes Electrónicos y Electromecánicos Argentina, actualmente existen 19 millones de gamers", indica Hurtado.
En este escenario de crecimiento, mediado por las tecnologías digitales, donde casi todas las prácticas se modificaron, el simracing es una nueva manera de vivir las competencias automovilísticas que atrae, sobre todo, a las nuevas generaciones, pero se rige por las reglas del automovilismo tradicional.
"Si el automovilismo en la Argentina es una tradición, el simracing es una forma renovada de mantenerla viva y, a su vez, hacerla accesible a más jóvenes para que, además de vivir esta pasión a través de una pantalla, puedan ser protagonistas, corredores", destaca Hurtado.
En este sentido, según explica el especialista, para ser un simracer no es necesario hacer una inversión multimillonaria, ni tener una gran computadora: con un sistema operativo de gama media, un simulador de manejo y el acceso al juego, ya es posible empezar a correr.
"Esta es la razón por la cual cada vez más jóvenes se suman a esta tendencia. En un país donde existen 19 millones de gamers, sin duda, hay lugar para que el simracing siga creciendo cada vez más", resalta.
"Los eSports, y en particular el simracing, son, cada vez más, tierra fértil para el marketing y la publicidad. Además de su relevancia en términos de audiencia y aficionados, un punto importante es la estrecha relación que habilita este deporte entre los ídolos o jugadores y las audiencias", indica Hurtado
Según explica el especialista, esto permite a las marcas llegar a las nuevas generaciones de una manera más directa y orgánica, lo cual se potencia cuando las marcas logran dar con el influencer "correcto" y aprovechan sus redes sociales como canales de difusión.
"Otro beneficio para los anunciantes es que los eSports son uno de los pocos canales de difusión que aún no tienen saturación publicitaria y esto es una gran ventaja en términos de relevancia. Como correlato, la inversión publicitaria se optimiza, al llegar a la audiencia correcta, con el mensaje y portavoz correctos", destaca.
Muchas de las empresas que patrocinan competencias de simracing están ligadas a los eSports en general y, muchas otras, tienen una historia como patrocinadores del automovilismo real.
Por ejemplo, marcas como Pirelli, Shell, Red Bull, Movistar y Río Uruguay Seguros son empresas que fueron y son activos patrocinantes en las principales categorías de automovilismo nacionales e internacionales.
Entre ellas se destacan empresas automotrices, petroleras, de neumáticos y de repuestos. Las últimas en sumarse a esta tendencia fueron las tecnológicas.
"Hoy las marcas pueden asociarse al mundo del simracing de muchas maneras: desde patrocinar un campeonato nacional o simracer hasta crear competencias propias dentro de las empresas. En este sentido, el automovilismo virtual permite a las marcas expandirse, al llegar a nuevas audiencias de una manera lúdica y renovada", concluye Hurtado.