La introducción de una interfaz olfativa compacta y suave permite a los usuarios experimentar una amplia gama de aromas, como el romero, el mojito, los panqueques y el durian.
Durante mucho tiempo, el desafío de reproducir olores en la realidad virtual fue un obstáculo frustrante que impidió que los dispositivos de RV ofrezcan una experiencia sensorial completa en la mayoría de los entornos.
Estas limitaciones contribuyeron a disminuir el entusiasmo de muchas personas por el metaverso.
"Teniendo en cuenta la retroalimentación/generación del olfato, la investigación aún está en pañales", remarca el profesor Xinge Yu, del departamento de Ingeniería Biomédica de la Universidad de Hong Kong (China).
"Las tecnologías actuales de generación de olfato se asocian principalmente con un gran instrumento para generar olor en un área/habitación cerrada o un conjunto de realidad virtual voluminoso incorporado, donde la conexión por cable, la gran demisión, la función de generación de olor sordo y el bajo tiempo de respuesta hacen que estos comentarios de olfato métodos muy por detrás del desarrollo de dispositivos de realidad virtual basados en visuales/auditivos y, por lo tanto, limitan drásticamente sus campos de aplicación", añadió.
Xinge Yu, autor principal de un reciente artículo publicado en Nature Communications, planteó: "En la realidad virtual, las personas pueden interactuar visualmente y auditivamente, y también pueden tocar objetos virtualmente. Sin embargo, ¿qué pasa con el sentido del olfato y el gusto?".
Los esfuerzos previos para generar olores en la realidad virtual implican el uso de complicados sistemas con cables, líquidos incómodos y dispositivos voluminosos que no eran prácticos para su uso en el hogar.
Con el objetivo de solucionar esta problemática, Yu y Yuhang Li, coautor del artículo y profesor en la Universidad Beihang de Pekín, aplicó sus conocimientos en el diseño de electrónica flexible para crear dos interfaces portátiles.
Una de ellas se puede colocar en la piel entre la nariz y la boca, de manera similar a una venda, mientras que la otra se adhiere debajo de los auriculares, asemejándose a una mascarilla.
"Aquí, informamos un conjunto de selección de materiales, diseños de dispositivos, esquemas de integración y diseños de sistemas para interfaces de olfato controladas de forma inalámbrica que incorporan matrices de OG de escala milimétrica en láminas electrónicas delgadas, suaves y flexibles", detalló.
Y añadió: "Los formatos portátiles de las interfaces olfativas están diseñados, desde la superficie de la piel montada directamente sobre los labios, hasta la electrónica basada en máscaras faciales"
"Por lo tanto, pueden establecer un puente entre la electrónica y los usuarios para amplios campos de aplicación que van desde experiencias inmersivas de VR/AR, a la entrega de mensajes a usuarios discapacitados, al control de emociones y al tratamiento médico", resaltó.
Ambas interfaces hacen uso de generadores de aromas en miniatura, los cuales están compuestos por una matriz de diminutos recipientes que contienen cera de parafina perfumada.
Cuando se aplica calor a través de una fuente ubicada debajo de la cera, esta se calienta y se convierte en una especie de vela perfumada que puede reproducir varios aromas en tan solo 1.44 segundos, según explicó detalladamente Yu y Li.
Al concluir la experiencia, se emplea una bobina de cobre que activa un imán para comprimir la cera y enfriarla, lo que detiene la difusión del aroma. De esta manera, se logra crear una experiencia sensorial de olores dentro del metaverso.
De acuerdo con las explicaciones de Yu, se observó que a mayor temperatura, el olor se vuelve más intenso y reconocible.
Sin embargo, esto implica un posible calentamiento considerable de las interfaces, alcanzando los 60 °C, lo cual puede resultar peligroso para la piel humana.
No obstante, Yu aseguró que la interfaz fue diseñada de forma segura, con un diseño "abierto" que permite la circulación del aire caliente, y con una pieza de silicona que actúa como una barrera protectora entre la piel y el dispositivo.
Existen dos alternativas disponibles para la interfaz de olfato:
Los investigadores exhibieron la capacidad de personalización de las interfaces, mostrando la reproducción de 30 aromas distintos, que incluyeron fragancias como piña, jengibre, té verde, caramelo y golosinas.
Se consideró que estas interfaces de olfato suave en el metaverso poseen un enorme potencial en diversas aplicaciones prácticas, abarcando desde el entretenimiento y la educación, hasta las interfaces hombre-máquina.