Uber quiere dominar el segmento de transporte 4.0. Por eso, la empresa decidió ampliar sus servicios y llevar el modelo de negocios a nuevas tierras.
Como si el transporte de pasajeros y delivery no fuera suficiente, a partir de hoy, Madrid (España) será testigo de la primera red de alquiler de monopatines eléctricos de Jump, la empresa adquirida por Uber para prestar este servicio.
Sin embargo, no es la primera plataforma de este estilo en desembarcar en España.
Jump by Uber se integra en la misma aplicación VTC (vehículos con conductor), por lo que los usuarios solo tienen que actualizar la versión de la app (o bajarla si no la tenían) para encontrar dónde retirar y devolver estos nuevos vehículos.
De esta forma, Madrid se convierte en la primera ciudad europea donde está disponible.
Para empezar a utilizarlo, basta con descargarse la app de Google Play o la App Store. El precio del servicio será de 1 euro para desbloquear el vehículo y 0.12 euros por minuto. Durante el primer mes, los usuarios tendrán 10 minutos gratuitos para probar cómo funciona.
El despliegue de la aplicación no fue tan sencillo: para cumplir con la nueva normativa del estado y obtener la licencia de circulación, Uber debió poner mucho foco en la seguridad y las regulaciones.
"Una de las máximas prioridades de Uber es la seguridad de pasajeros, conductores y repartidores. El equipo de JUMP by Uber trabaja para garantizar los mismos estándares para los usuarios de los patinetes eléctricos. Los usuarios recibirán información relativa a la normativa municipal y los principales elementos para reforzar la seguridad en el uso del patinete eléctrico", aseguraron desde la compañía.
De esta forma, los usuarios pueden circular por los diferentes barrios de Madrid sin limitaciones durante el día. Por las noches, la empresa debe recoger todos los monopatines, revisarlos y asegurarse que estén en condiciones para el día siguiente. En este primer despliegue, Jump instaló 566 vehículos.