Elon Musk no tiene problemas en decir lo que piensa, pero eso muchas veces le ha traído problemas, como ahora el nuevo juicio al que debe enfrentarse.
En este caso es por un tuit donde aseguraba, declarando dos palabras, "financiación asegurada", que haría Tesla privada, comprando todas sus acciones.
Esto llevó a movimientos en la cotización de las acciones de Tesla, que al no cumplirse el vaticinio, llevaron a que muchos perdieran grandes sumas de dinero en la bolsa.
Y es por ello que iniciaron esta demanda.
Elon Musk se escuda en que Twitter es "la forma más democrática" de comunicarse con los pequeños inversores, pero esgrimió que "hay un límite" a lo que puede comunicar con los 240 caracteres que admite un mensaje de Twitter. Y eso puede llevar a malinterpretaciones de lo que realmente quería decir.
"Creo que se puede ser absolutamente sincero [en Twitter]. ¿Pero se puede ser exhaustivo? Por supuesto que no", se defendió.
Y eso que el tuit original que ha sucitado el jucio ni siquiera ocupaba el total de caracteres que se podían utilizar: "Estoy considerando sacar a Tesla de Bolsa a 420 dólares. Financiación asegurada". Esto fue el 7 de agosto de 2018.
Pero eso no acabó allí, ya que después lanzo tuits que complican sus actuales declaraciones, como "Los accionistas pueden vender a 420 o mantener las acciones [en la compañía excluida de Bolsa]", o un posterior "Se confirma el apoyo de los inversores. La única razón por la que no es seguro es que depende del voto de los accionistas".
Luego de que al comprobarse que esto no sucedería, las acciones bajaron estrepitosamente, y varios perdieron mucho dinero. Pero Musk refuerza su defensa diciendo simplemente "Las acciones de Tesla suben y bajan todo el tiempo", agregando que "Solo porque tuitee algo no significa que la gente lo crea o actúe en consecuencia", argumentó.
A los inversores se ha sumado la Comisión de Valores y Bolsa (la SEC), que ya abrió una investigación por la posible manipulación de la cotización de la acción de Tesla.
En su momento Musk acordó dejar la presidencia de Tesla, pagar una multa de 40 millones de dólares, y que sus tuits futuros fueran revisados de antemano antes de ser publicados.
Musk agregó en sus declaraciones, como para relativizar el hecho, que "El puro nivel de dolor para hacer que Tesla tuviera éxito durante ese período de 2017-2018 fue insoportable para mí y para muchos otros".
El empresario había tratado de trasladar el jucio a Texas, dodne tiene su sede Tesla, por que aseguraba que en San Francisco, donde se lleva el juicio, hay una tendencia negativa hacia él, que se ha reforzado desde la compra de Twitter, indicó El País.