Salir a la ruta, programar una velocidad que no supere los 130 kilómetros por hora y concentrarse en el camino siguiendo la hoja de ruta en la gran pantalla táctil. Si un auto adelante lleva una velocidad menor, no hay mayores riesgos porque el vehículo, automáticamente, empieza a frenar.
Entonces, el conductor puede decidir cambiar de carril para lo cual los sensores de punto ciego indican si hay cerca otro vehículo que no se vio por los espejos, para tomar precauciones, mientras que el sensor trasero hace saber si otro auto se acerca de atrás.
Todo esto ya es posible en la Argentina gracias a los asistentes de conducción que incorporaron varios modelos y que hacen de la seguridad una funcionalidad no sólo presente en la alta gama, sino también en modelos que arrancan en 700.000 pesos, lo que hoy se considera como un precio "medio".
En los últimos años, los asistentes para la conducción se han convertido en un elemento cada vez más importante para los clientes por dos motivos: pueden salvar su propia vida en accidentes y ayudan a prevenirlos.
Es decir, no solo los compradores ya no se conforman con el doble airbags y los frenos con ABS que deben traer de serie, sino que buscan más airbags, el control de estabilidad (ESP) y todo lo que puedan sumar como adicional para proteger a los ocupantes del auto.
Popularmente, estos sistemas se llaman ADAS (Advanced Driver Assistance Systems) y tienen un costo adicional.
En la Argentina modelos de diferentes segmentos como el Citroën C4 Cactus, un SUV para el segmento chico; el Peugeot 3008, que pertenece al mediano; y la Ford Ranger, una pickup orientada más que nada al trabajo, cuentan con estos sistemas que anticipan un equipamiento que será común en los vehículos autónomos.
Así definen en Ford la consecuencia de contar con el Control Crucero Adaptativo. Hasta ahora, se conocía el Control Crucero a "secas", cuya función consiste en programar una velocidad determinada que el vehículo alcanzará automáticamente.Con el agregado “adaptativo”, el sistema disminuye la velocidad y acelera automáticamente para mantener ritmo del vehículo que está delante.
El sistema se desarrolló en base a una experiencia realizada en la pista de pruebas de la planta en Ford en Detroit y promete evitar los embotellamientos.
"Aunque los ciudadanos hagan el mejor esfuerzo para conducir correctamente, las reacciones tardías pueden causar un efecto dominó que puede redundar en demoras en el tránsito sin motivo aparente y sumar hasta una semana tras el volante innecesariamente", explicaron los investigadores de tráfico de la Universidad de Vanderbilt y Ford compararon el rendimiento del CCA con distintos conductores en situaciones de tráfico.
"Los ciudadanos, cuando no estamos prestando atención, empeoramos estos embotellamientos. Con el Control Crucero Adaptativo demostramos que las
tecnologías de asistencia al manejo pueden mejorar nuestras capacidades de conducción”, dicen en Ford.
"Los ciudadanos, cuando no estamos prestando atención, empeoramos estos embotellamientos. Con el Control Crucero Adaptativo demostramos que las
tecnologías de asistencia al manejo pueden mejorar nuestras capacidades de conducción”, dicen en Ford.Otro funcionalidad que también tiene Ranger y ya se encuentra disponible en varios modelos es el Sistema de Mantenimiento de Carril (Lane Keeping Aid).
Su funcionamiento se basa en una cámara que se encuentra instalada detrás del espejo retrovisor del parabrisas, con la función de monitorear las marcas de los carriles de la ruta y detectar los desvíos involuntarios fuera del carril. El nuevo DS7 Crossback también lo tiene.
Lo que hace esta función es a través de una cámara detectar un inminente desvío involuntario de carril, de forma que el sistema usará la dirección y la pantalla del panel para alertar al conductor y/o mantenerlo en su carril.
En la mayoría de los autos, el Sistema de Mantenimiento de Carril puede anularse temporalmente y en cualquier momento si el conductor lo desea. De lo contrario, cada vez que se quiera cambiar de carril, y no se use la luz del guiño, tendrá una alerta sonora avisando de la situación.
Pasando a otros modelos, como los Peugeot 3008 y 5008, también cuentan con un paquete High Tech con otros sistemas de asistencia en el manejo que contemplan aplicaciones que agregan seguridad y también suman comodidad.
Entre los asistentes que facilitan la conducción, se encuentra el de ayuda al estacionamiento, un elemento disponible en varios modelos en el mercado local.
Este actúa a través de una cámara con una visión 360 del vehículo en tiempo real.
En el caso de los SUV de Peugeot, también cuentan con Hill Assist Descent Control (HADC), una asistencia en el descenso que permite controlar la trayectoria del auto en fuertes pendientes.
Esta función característica de los vehículos 4x4, que incluso la tienen la mayoría de las pickups, reduce el riesgo de que el vehículo se deslice o pierda el control. Además, puede mantener una velocidad muy baja de descenso (3 km/h) con la caja de cambios en modo Neutral. La función se activa a menos de 30 km/h, con una pendiente de al menos 5 por ciento.
Otros elementos que suman estos modelos son las alertas de peligro, con la asistencia activa sobre la dirección y la alerta de tiempo de conducción. Esto le sugiere un descanso al conductor después de un largo período sin parar. Ford Kuga, Ford Ranger y C4 Cactus son algunos de lo que cuentan con el sistema.
También es muy útil el sistema activo de vigilancia de ángulo muerto –detección de punto muerto– con intervención activa en el manejo y corrección de la trayectoria, y los frenos automáticos de emergencia (Active Safety Brake), que detienen completamente el vehículo en caso de riesgo de colisión.
Por último, son varios los modelos que suman la Conmutación Automática de las Luces Altas, evitando el encandilamiento en la ruta.
El caso del pequeño C4 CACTUS, que acaba de lanzarse en el Mercosur, también es un ejemplo de asistentes al alcance del bolsillo (porque es un modelo más económico) y con la máxima seguridad.
El nuevo SUv tiene el sistema automático de frenado de emergencia para reducir la velocidad de impacto o evitar una colisión frontal del vehículo si el conductor no puede reaccionar, gracias a una cámara ubicada en la posición superior del parabrisas. El sistema evita choques o minimiza la gravedad del impacto cuando el choque es inevitable.
También tiene un alerta de falta de atención del conductor, cuando identifica cambios de trayectoria en relación a las marcas de carril de forma brusca. Entonces, aparece en el tablero el mensaje "Conducción arriesgada: ¡Haga una pausa!", acompañada de una señal sonora más pronunciada.
Otro elemento para destacar son los faros antiniebla con Corner Light, que son luces de curva estáticas que proporcionan un haz de luz adicional para iluminar el interior de las curvas, y mejorar la visibilidad y la seguridad en las esquinas y empalmes.
A todos estos sistemas, hay que agregar que las marcas incorporan cada vez más elementos que buscan hacer la conducción segura, pero también práctica y placentera. El mejor ejemplo son los masajes en el asiento de los SUV de Peugeot o del Citroën C4 Spacetourer.
También suman comodidad en cuanto a los sistemas para el entretenimiento, los cuales son cada vez más completos.
Los mismos ya no piensan solo en ser compatibles con los celulares, sino que ofrecen la más completa información y posibilidad de interacción entre el conductor y el auto. El caso más representativo es el OnStar de Chevrolet, un sistema de asistencia telefónica que resuelve cualquier tipo de problema a los clientes de la marca.
Pero un dato muy interesante y para tener en cuenta: la conexión de los dispositivos con los sistemas de entretenimiento de los vehículos y el uso de muchos de ellos se debe hacer con los autos detenidos. Es decir, no se pueden manipular ambos elementos a la vez, lo cual también es una buena medida de seguridad para que el conductor no deje de prestar atención.
Sin dudas, todos estos sistemas son un paso adelante en la industria, que busca tener vehículos cada vez más seguros. Pero ¿tantos asistentes no atentan contra la concentración del conductor?
Es un largo debate. Sucede que, programar la velocidad, que el auto frene solo y que avise si se está cruzando de carril, en un viaje muy largo, llevan a ir perdiendo en algunos momentos la atención en el camino.
Seguramente, todo avance es positivo y a favor de la seguridad, porque modelos como los de Volvo, que también ya se venden en la Argentina, hasta toman precauciones si se cruza un peatón o una bicicleta en una noche oscura y un camino sin luces.
Lo importante es que no se debe esperar que el auto avise para tomar decisiones al volante, o dejar todo librado al azar, sino que siempre es mejor mantener la concentración y estar atento.