Almacenar información personal de manera errónea en un smartphone o en la nube, podría provocar fugas de datos, situaciones que sucederán con mayor frecuencia en 2023.
Esto fue identificado por un informe de "Predicciones de privacidad para 2023", que realizó la compañía de ciberseguridad y privacidad digital Kasperksy.
El mismo identifica algunos de los riesgos en privacidad basados en los cambios y tendencias observados por sus expertos durante este año 2022.
Según Kasperksy, estas predicciones se dieron en un año marcado por la actividad reguladora en materia de privacidad en todo el mundo, tanto en el sector público como en el privado.
Algunas medidas se focalizaron en la vigilancia del sector comercial y las prácticas perjudiciales para los consumidores en materia de seguridad de los datos.
Otras medidas que se ejecutaron este año pasaron por la protección de la información confidencial de las técnicas invasivas de 'machine learning' (aprendizaje automático), que se implementó con los datos recabados.
Por ese motivo, la seguridad y privacidad online de los datos son prescindibles para evitar riesgos en 2023.
Con este fin, la compañía resaltó que uno de los retos a los que se enfrenta la privacidad es el uso del 'smartphone' como reemplazo a los documentos físicos.
Los móviles se utilizan cada vez más como método de pago en vez de las tarjetas de crédito y, además de como 'wallets', también son el lugar de almacenamiento de documentos personales, inclusive el DNI y el certificado de vacunación contra el Covid-19.
Aunque esto permite que el usuario pueda llevar todo lo importante en un mismo terminal, Kasperksy consideró que esta práctica es un peligro.
Según el informe, esto exigirá a qué usuarios deban ser estrictos con la seguridad de los móviles y la forma en la que almacenan los datos en ellos a fin de proteger su privacidad.
La mala configuración de algunas soluciones de almacenamiento de datos en la nube, es otro de los riesgos importantes, que tiene como consecuencia las fugas de los datos confidenciales almacenados en línea.
Kasperksy, animó a las corporaciones a invertir en prevención de fugas de información, al igual que en educación de los empleados, con el fin de profundizar la concienciación en ciberseguridad.
Hay que tener presente que solo el hecho de pedir comida o requerir un servicio de transporte genera datos de geolocalización confidenciales.
Desde la compañía apuntaron que será un desafío a tratar para el año próximo.
Es por eso, que cada vez son más los usuarios que temen por la privacidad y toman medidas para proteger sus cuentas personales reduciendo su huella digital.
La empresa de ciberseguridad destacó en su informe que habrá un aumento en la contratación de seguros contra violaciones de datos.
Asimismo en base a la privacidad de los usuarios, señaló un incremento de preocupación por la privacidad del metaverso.
Sin embargo, subrayó que los datos generados en pagos digitales o mediante el uso habitual del móvil ya permiten extraer conclusiones "sensibles" acerca del usuario.
Del mismo modo, los dispositivos inteligentes en los hogares, la videovigilancia en las ciudades, o el amplio uso de internet de las cosas o IoT, con objetos físicos y otras tecnologías también hacen que el concepto de privacidad se alivien.
Kasperksy dejó en claro que "el metaverso lleva experiencias físicas al mundo virtual", pero el mundo online ya está "apoderándose" del físico.
En consecuencia, insistió en que se debe tener precaución con la privacidad en ambos sentidos, siendo un riesgo las implicaciones de la tecnología tanto en el metaverso, como en el mundo físico.
En definitiva, la compañía igualmente apuntó cómo el mercado de datos se volvió más "diverso y localizado" en cuanto al seguimiento de comportamiento del usuario, que, por otra parte, dispone de más controles en la transferencia de estos datos a nivel transfronterizo.
El caso de las páginas web es que contienen rastreadores que recopilan información del usuario y vigilan el comportamiento del mismo para segmentar la publicidad.
Según comentó Kasperksy, se volvió más común que las autoridades se comprometan a ser precavidas a la hora de compartir datos con empresas de otros países.
Ahora bien, esta sospecha por la transferencia de datos a otros países implica que las corporaciones confíen en organizaciones de ámbito más local, lo que también involucra algunos riesgos en la privacidad.
La compañía, con respecto a esto, advirtió que las entidades de menor tamaño "pueden resultar menos interesantes a los piratas informáticos", pero a la vez, están menos controladas por los organismos reguladores.
Para Vladislav Tushkanov, el experto en privacidad de Kaspersky, durante 2022 "la actividad regulatoria se ha movido desde el mercado global de datos hacia los actores locales".
"El año ha estado repleto de situaciones que han mostrado cómo la recogida de datos de los consumidores puede afectar directamente las relaciones entre ciudadanos y gobiernos", comentó.
A su vez consideró el avance sobre el metaverso y la Inteligencia Artificial (IA), que "seguirán estando en el punto de mira de los expertos en privacidad en 2023".
Tushkanov sentenció que "Creemos que los acontecimientos geopolíticos y económicos de 2022, así como las nuevas tendencias tecnológicas, serán los principales factores que influirán en el panorama de la privacidad el año que viene".