Hablar de un "muscle car" es pensar en un auto de gran cilindrada y potencia, con tantos caballos como nadie pueda imaginar.
Sin embargo, en los tiempos que corren y debido a las limitaciones que se deben respectar en emisiones, los fabricantes estadounidenses necesitan buscar alternativas.
Así es como el máximo responsable de Fiat Chrysler, Mike Manley, anunció que la futura generación de sus Dodge Charger y Challenger recurrirá a la electrificación.
Los nuevos modelos, que llegarán en algunos años más, dejarán atrás la vieja y pesada plataforma LX de Chrysler -con 13 años de antigüedad- y puede que también los grandes motores de ocho cilindros, a favor de sistemas de propulsión que combinen motores de combustión y eléctricos, según comentó en Detroit News.
"La realidad es que esas plataformas y la tecnología que usamos necesita evolucionar. No pueden seguir existiendo a mediados de los años 2020. La nuevas tecnologías permitirán reducir mucho el peso y debemos pensar en los sistemas de propulsión de otra manera. La electrificación se puede utilizar para suplementar a estos vehículos", afirma Manley.
Así, la idea de Dodge para el futuro de los muscle cars no es convertirlos en modelos 100% eléctricos sino más bien utilizar tecnología híbrida para mejorar sus prestaciones, como ya han hecho fabricantes europeos y japoneses en deportivos y superdeportivos de todo tipo.
"Creo que la electrificación será desde luego parte de la fórmula que marque el futuro de los muscle americanos. Lo que no será es un motor V8 con compresor y 700 CV", concluye Manley.
Mientras tanto, Dodge no debe tener demasiado apuro para lanzar su nueva generación de modelos, ya que durante 2018 el Challenger batió récords de ventas, convirtiéndose en el segundo pony car más vendido en Estados Unidos, por detrás del Ford Mustang y por delante del Chevrolet Camaro, con 66.716 unidades comercializadas, de las que un 42% son V8.
El modelo cuenta con un motor 3.6 litros V6 (que en un futuro podría ser biturbo e ir apoyado por un motor eléctrico para sustituir al HEMI V8), un 5.7 litros HEMI V8, un 6.4 litros HEMI V8 y un 6.2 litros V8 con compresor.
"La electrificación no puede ser la parte dominante de un muscle car, pero la electricidad con el objetivo principal de contribuir a mejorar las prestaciones del vehículo es algo muy diferente", asegura el CEO de Fiat Chrysler