Los entusiastas automovilísticos de la compañía estadounidense de pintura removible DipYourCar presentaron un proyecto de un Audi A4 sensible a la temperatura que cambia su color incluso cuando se lo toca al auto.

El equipo de la empresa decidió hacer un experimento y ampliar en los autos la tecnología conocida por muchos como los anillos de humor, que cambian su color, de acuerdo con la temperatura del dedo del dueño.

Al igual que en los anillos, la aplicación automotriz implica el uso de cristales líquidos termotrópicos que producen diferentes colores a diversas temperaturas, explica el fundador de la compañía, conocido como Fonzie.

A diferencia de la mayoría de pinturas sensibles al calor existentes que utilizan pigmentos termocrómicos, esta opción es mucho más sensible y produce una mayor gama de colores.

Al principio el equipo aplica una capa base de la pintura de goma líquida plastidip que le da al auto un color negro mate. Luego rocía ocho capas de la pintura especial con cristales líquidos para producir el efecto deseado. Se ve como un líquido de color beige poco agradable a primera vista, pero una vez aplicado casi no cambia el color autentico del vehículo.

Desde el momento en que el auto sale de la cabina de pintura, comienza a transformarse en un caleidoscopio de colores de verde a azul. Tal como era de esperar, el acabado produce un efecto de cámara térmica y cambia ante tus ojos incluso cuando lo tocas.

No obstante, Fonzie se apresuró a advertir que el proyecto es simplemente una prueba divertida para ver si es posible aplicar este tipo de pigmento en los autos. De acuerdo con el empresario, para un uso prolongado, sería necesario colocar otra capa de sellador para proteger el acabado del desgaste habitual.

La nueva "herramienta" del Model S

Mientras todos están esperando la segunda generación del ya viejo y conocido Tesla Model S, Elon Musk, CEO y fundador de la empresa, reveló que la nueva versión del modelo actual y buque insignia de la marca no necesitará palanca de cambios ni la de intermitentes, porque el propio automóvil "adivinará" la dirección a seguir.

Musk presentó la variante Plaid S del Tesla Model S, cuyo diseño interior cuenta con un volante rectangular deportivo, similar al de los bólidos de Fórmula 1, una pantalla táctil y carece de las tradicionales palancas.

"No más tallos. El coche adivina la dirección de conducción según los obstáculos que 've', el contexto y el mapa de navegación" obtenidos por sus sensores y cámaras, escribió el cofundador de Tesla en Twitter, en respuesta a un comentario sobre el diseño del nuevo Model S.

Lo nuevo

Lo asombroso de este autos es que las funciones que ejecuta la palanca de cambios se han incluido en la pantalla táctil. "Después de conducir sin usar una palanca PRND ['parking', reversa, neutral, directo] durante unos días, se hace muy molesto volver atrás y usar una palanca de cambios", respondió a otro tuit.

En las versiones anteriores del Model S y Model X, Tesla, al igual que la mayoría de los coches convencionales, usaba las palancas intermitentes para las señales de giro, faros y controles de limpiaparabrisas. Además, el fabricante implementaba en sus vehículos una palanca en el volante para otros controles como el piloto automático y los modos de conducción (PRND).

En su lugar, Tesla ha emplazado botones táctiles en el volante que realizarán las mismas funciones. Además, según documentos internos de esa compañía obtenidos por el portal Electrek, los nuevos coches de la empresa de Elon Musk utilizan sensores de piloto automático y la inteligencia artificial para determinar automáticamente el modo de conducción, trayectoria y superar obstáculos.

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