Cervecería y Maltería Quilmes no solo es una empresa pionera en su rubro. Con un fuerte foco en la innovación y el desarrollo de emprendimientos (gracias a Eklos, su aceleradora de proyectos), la compañía se posiciona como una de las líderes en materia de transformación digital.
Ya no es una novedad que todas las industrias atraviesan procesos de cambios orientados a nuevas estrategias, procesos más eficientes y con la vista puesta en herramientas virtuales. Tanto es así, que la firma decidió “digitalizar” el clásico proceso de devolución de envases a la hora de comprar cervezas.
“Desde hace 128 años nuestras decisiones están enfocadas en ofrecerle al consumidor la mejor cerveza, acompañada de la mejor experiencia cervecera”, explica Giannina Galanti Podesta, directora de marca Quilmes, a iProUP. “Trabajamos en un camino de transformación digital, con nuevos productos y servicios innovadores, simples y ágiles que simplifiquen la vida de nuestros consumidores. Este nuevo sistema reemplaza al clásico papel que entregaba el almacenero”, suma.
En este sendero nació Quilmes VALE, la primera tarjeta que permite guardar de manera virtual envases y “llevarlos en el bolsillo”. Su funcionamiento es sencillo: los clientes llevan los envases al comercio adherido, este crédito se carga en una tarjeta y luego se puede usar en cualquier lugar adherido. Es totalmente gratuita y funciona para las marcas Quilmes, Brahma y Stella Artois.
Desde la empresa hacen foco no solo en la practicidad para los usuarios, sino en los beneficios ecológicos: “VALE permite digitalizar y contar en un único plástico la cantidad de envases y litros y traducirlo en un saldo recargable. Por lo tanto permite a la gente liberar espacio en su casa, no hace falta cargar con envases, compras a un mejor precio -sólo la cerveza y no el envase- y ayudas al medio ambiente porque el envase se puede utilizar hasta 29 veces”, explica Galanti Podesta.
Por ahora, VALE solo está disponible en Mar del Plata, ciudad seleccionada por la firma para lanzar la primera fase de la prueba piloto del servicio. Sin embargo, son optimistas y esperan que luego se extienda a otras plazas del interior del país.
Con 128 años de historia, la empresa atravesó diferentes etapas. En este camino, aparecieron los envases retornables, con packagings 100 por ciento sustentables. “Nuestra categoría siempre se caracterizó por el consumo de este tipo de envases . Con este aprendizaje, quisimos facilitar la compra y por eso creamos esta plataforma”, explica la ejecutiva.
Con un desarrollo que llevó varios meses y diversos pilotos -especialmente para tratar de entender la mejor forma de llevar adelante un método digital- la búsqueda siempre fue para encontrar “la herramienta más fácil tanto para el cliente, comercio y la operación de ventas y logística”.
Pero como todo proyecto nuevo, al principio tuvieron que hacer mucho hincapié en capacitar a los clientes y a los comerciantes. Al respecto, Galanti Podesta sostiene que “es una herramienta muy buena porque pueden controlar stock de envases, liberar espacio, fidelizar a sus clientes y además no tienen ningún costo para ellos”.
“Por el momento estamos tomando este primer lanzamiento como una etapa de aprendizaje en el almacenamiento virtual de envases”, finaliza la directora de marca. De cara a un futuro cercano, la empresa busca seguir de cerca el funcionamiento de la tarjeta con el objetivo de encontrar nuevas oportunidades de mejora y llevarlo a otras ciudades.
¿Podrá ser el primer paso de Quilmes como fintech?