Juan Escofet es licenciado en Marketing y CEO de Agente Central, una startup argentina que ofrece servicios de telepresencia y vigilancia en inmuebles corporativos y residenciales.
El ejecutivo compartió con iProUP su análisis sobre el futuro en la industria de las herramientas de seguridad a raíz de la pandemia y sus efectos sobre gran parte del entramado socioeconómico.
Ha tenido un impacto de lleno en nuestras operaciones y nos obligó a adelantar algunos procesos programados.
Así que transicionamos de tecnología antes y más rápido de lo que esperábamos. Esto nos permitió que una parte de los operadores trabaje desde su casa, lo cual tuvo como consecuencia reforzar el servicio y pasar a tener una cobertura todavía mayor de la que teníamos, por un lado, y reducir el número de personas en nuestra sala de operaciones, por el otro.
Y con respecto a lo que no es la operación central, la empresa ya estaba muy preparada para el trabajo remoto.
En el mediano plazo, estamos en el segmento del teletrabajo, particularmente, la telepresencia, que está ganando fuerza. Este tipo de soluciones de seguridad, una vez que pase el temblor, va a ser más requerido, así que nos estamos preparando para crecer.
Lamentablemente en términos macroeconómicos, visualizamos un escenario de crisis, que suele ir acompañado de inseguridad. En lo que atañe a nuestros servicios, esto va a generar una demanda mayor; aunque la gran crisis económica va a ser generalizada y nos va a pegar a todos.
Nosotros estamos en dos sectores. Por un lado, la industria de las soluciones por telepresencia. Debido a la adopción masiva del teletrabajo y a la mayor confianza en él, esta vertical va a cobrar más protagonismo.
Por el otro, la vertical de la seguridad, que, en el corto plazo, probablemente, también va a crecer en términos de demanda por las consecuencias que la crisis económica inminente va a tener sobre el entramado socioeconómico.
El Gobierno está haciendo lo que tiene que hacer, y bien, dentro de las libertades que tiene. En paralelo, yo recomendaría seguir haciendo lo que hay que hacer, por un lado, e ir hacia la audacia, por el otro, para buscar el consenso popular y aplicar medidas inteligentes que acompañen una adopción más rápida de la nueva normalidad.
Tiene que aplicar medidas rápidas con astucia tendiente hacia la nueva normalidad evitando las demoras y los choques. No sé si se trata tanto de un consejo como de un deseo.