China, Italia y España son los tres países donde la pandemia del coronavirus causó (y todavía causa) estragos. Si bien el país asiático ya está logrando contener la expansión del virus, los países europeos están batallando todos los días para reducir el número de víctimas y contagiados.

Sin embargo, en Corea del Sur la situación es muy distinta, donde pudieron rápidamente revertir las cifras de los contagios y alcanzar un modelo de control que se  convirtió en un ejemplo a seguir por todo el mundo. ¿Cómo lo hizo? Con una app móvil.

Gracias a su uso, las autoridades pudieron mantener a los afectados en sus domicilios y sin posibilidad de propagar el COVID-19. La idea ha partido del Ministerio de Interior coreano, que ha desarrollado esta aplicación que permite a los afectados (y a los recién llegados al país) a comunicar su sintomatología de forma constante y mantener localizados a los infectados por coronavirus mediante el GPS de sus teléfonos.

Las autoridades de aquel país han sido rápidas al comprender que lo fundamental para hacer frente a la pandemia es el aislamiento total y lo que se persigue mediante el desarrollo de esta app es que los afectados no sean elementos contaminantes.

Esta herramienta es voluntaria, pero los coreanos la han abrazado sin dudarlo a la vista de los resultados. Esta aplicación fue concebida, en un principio, para controlar a todos los extranjeros que accedían al país provenientes de áreas afectadas por el coronavirus.

La app ha sido bautizada como Co100 y ofrece un buen incentivo a sus usuarios: les alerta cuando entran en radio inferior a los 100 metros de una persona infectada. Con esta simple función, se permite a los usuarios sanos a no acercarse a zonas potencialmente problemáticas, con lo que ya de partida, se reducen posibilidades de contagio.

Además de la aplicación, las autoridades hacen un seguimiento de los movimientos de los enfermos mediante los pagos de sus tarjetas. De esta manera, cada vez que un afectado infringe las normas, las autoridades pueden ser alertadas en tiempo real y adoptar las medidas necesarias. 

Por otro lado, quienes se descargan la aplicación, aceptan que sean trazados mediante GPS, con lo que las autoridades sanitarias pueden hacer un seguimiento de los pacientes en función de sus síntomas.

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