En la mayoría de los países, la conexión a internet por WiFi suele ser mejor (más estable y rápida) que los datos móviles. Sin embargo, un estudio realizado por OpenSignal revela que, en 33 países del mundo, la situación funciona a la inversa.
Hay de todo: países africanos, europeos, latinoamericanos y europeos del este. Con diferencias abismales, con Australia, Omán, República Checa, Austria, Irán y Sudáfrica entre las naciones más dispares.
Por otra parte, hay países donde ambas conexiones no son competitivas. Por ejemplo, en Hong Kong, Singapur y Estados Unidos, el WiFi le saca una inmensa ventaja a los datos. Y también funciona al revés: en el Líbano, la conexión LTE alcanza los supera por 25mbps de bajada la conexión tradicional.
Como resultado, el informe detalle que “no siempre tener WiFi es mejor que los datos”. Si bien se trata de una regla que se suele respetar en la mayoría de los casos, la promesa de las nuevas tecnologías 5G prometen cambiar el paradigma y transformar las conexiones como las conocemos.