Cualquier empresario que haya decidido crear un comercio electrónico en los últimos años ha oído hablar de Shopify. La popularidad de esta plataforma canadiense entre los emprendedores se debe a que ha desarrollado diversas herramientas que permiten a usuarios sin conocimientos de programación ni de ecommerce crear y gestionar una tienda online con un costo inicial reducido, informó el sitio america-retail.

El funcionamiento de Shopify es parecido a otros sistemas como WordPress o Prestashop, pero la compañía canadiense se ha especializado en la creación de comercios electrónicos. Brinda a sus usuarios herramientas que van desde la búsqueda del dominio y la creación del diseño de la web hasta el uso de distintas pasarelas de pago o la gestión del inventario y los envíos, todo desde la misma plataforma y en pocos pasos.

Además, Shopify permite a sus clientes tener un ecommerce sin inventario propio mediante el sistema de dropshipping, por el que la tienda electrónica vende un producto de un tercero y éste lo envía directamente al cliente, sin que pase en ningún momento por las manos del intermediario.

Gracias a esa adaptación, la plataforma tiene más de un millón de comercios creados a través de su plataforma, ingresos que se han multiplicado por cinco desde 2014 -año en el que salió a bolsa- y que superaron en 2018 los mil millones de dólares. Otra de las ventajas de Shopify es su precio, con suscripciones mensuales que varían entre los 29 dólares del plan básico, los 79 del medio y los 299 del avanzado.

"Se trata de ofrecer lo que hacen los grandes operadores con recursos modestos. Muchas compañías no tienen la capacidad para abordar un proceso de transformación digital, y hoy día si no me conecto no me conocerán. Estas herramientas les permiten ser competitivos en el nuevo entorno de consumo", señala Enrique Porta, socio responsable de Digital Business y sector Consumo & Distribución para KPMG España.

Te puede interesar