El salario necesario para ser parte de la "clase media" en Argentina alcanzó cifras que inquietan a millones de familias. Y las nuevas proyecciones de cara al 2026 marcan un escenario desafiante para quienes buscan mantener su estatus socioeconómico.
Cabe remarcar que ser de "clase media" en Argentina se determina en función de los ingresos de los hogares y se caracteriza por tener un estilo de vida relativamente cómodo.
En los últimos días, se actualizaron los valores que definen a este estrato social. El Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires (IDECBA) reveló que una familia tipo necesita más de $2.076.904,91 por mes para integrar la clase media en CABA.
El cálculo toma como base un hogar conformado por dos adultos de 35 años, ambos con empleo y propietarios de su vivienda, más dos hijos varones de 9 y 6 años.
Para esta misma composición familiar, la línea de pobreza se ubicó en $1.308.061, medida a través de la Canasta Básica Total (CBT).
Mientras tanto, el umbral de indigencia, calculado con la Canasta Básica Alimentaria (CBA), se estableció en $703.325.
El sistema de clasificación de IDECBA establece categorías específicas según el nivel de ingresos familiares. Cada estrato social tiene parámetros claramente definidos.
Por encima de la línea de pobreza aparecen los denominados "no pobres vulnerables". Este grupo incluye familias con ingresos que van desde la CBT hasta la Canasta Total (CT), fijada en $1.661.524 para el hogar de referencia.
Un nivel superior corresponde al "sector medio frágil". Esta categoría agrupa familias con ingresos desde el valor de la CT hasta 1,25 veces ese monto. El tope para este segmento llega hasta $2.076.904,90 mensuales.
La clase media formal comienza con ingresos desde $2.076.904,91 hasta $6.646.095,71, equivalente a cuatro veces la Canasta Total.
Quienes superan este último umbral integran los sectores acomodados de la sociedad, también denominados como "clase alta".
Según los datos más recientes, la clasificación de ingresos mensuales por estrato social en CABA se compone de la siguiente manera:
Un punto clave que aclara el informe es que estos montos no contemplan el costo del alquiler, lo que puede modificar drásticamente la realidad de millones de familias que no son propietarias.
Para ellas, sostener un estilo de vida "de clase media" requiere sumar un gasto mensual adicional que, en muchos barrios, supera holgadamente el medio millón de pesos.