Las acciones de Mercado Libre, el unicornio nacional de comercio electrónico, se encuentran en uno de sus peores momentos del año. En noviembre, ya cayeron un 11% en Wall Street, afectada por:
Aunque días atrás logró rebotar y cerrar en u$s2.055, todavía están 11,7% abajo comparadas a su precio al 31 de octubre.
La semana pasada tuvo su peor golpe, ya que se desplomaron un 8% en un solo día y bajó de los u$s2000, situación que no pasaba desde fines de 2021.
Para Gustavo Neffa, director de Research for Traders, el retroceso responde a factores estructurales que presionan al negocio de Mercado Libre.
Según detalló, la firma enfrenta una creciente competencia por parte de Amazon, Temu y Shein, lo que la obliga a fortalecer su logística e incrementar la oferta de productos importados.
"A su vez, recibe críticas y denuncias por presuntas prácticas anticompetitivas vinculadas a la promoción de sus servicios financieros", precisó el analista.
Por otro lado, el entorno externo también sumó presión, ya que el Nasdaq retrocedió un 5% desde sus máximos recientes debido a las dudas sobre el ritmo de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal.
En este contexto, los inversores mostraron mayor aversión al riesgo y ajustaron posiciones en compañías de alto crecimiento como Mercado Libre, lo que amplifica la caída. A pesar del mal clima del mercado, las perspectivas a mediano plazo continúan favorables.
De acuerdo con Neffa, el precio objetivo para los próximos 12 meses se ubica en u$s2.750, aunque esta proyección fue revisada a la baja desde los u$s2900 estimados un mes atrás.
"El impacto del avance de empresas chinas y la presión competitiva de Amazon en Brasil nos llevó a moderar nuestras expectativas. La región es cada vez más competitiva", agregó.
Mercado Libre enfrenta uno de los mayores desafíos de su historia: defender su liderazgo en América Latina en un entorno donde la competencia ya es global.