La inversión en Bitcoin y otras divisas digitales puede perder rentabilidad si se cometen cuatro errores claves al no tener en cuenta los impuestos asociados a esta inversión.

"El boom de las criptomonedas atrajo a miles de argentinos que buscan resguardar su dinero, generar ganancias o simplemente aprovechar la volatilidad del mercado. Sin embargo, más allá de las subas y bajas del Bitcoin o Ethereum, hay un factor que muchos subestiman: los impuestos", afirma en diálogo con iProUP Magdalena Nicola, de Craneandotax.

En este sentido, expresa: "El ecosistema cripto en Argentina sigue sin una regulación clara, pero eso no significa que esté exento de obligaciones impositivas. De hecho, hay errores comunes que pueden hacer que la rentabilidad esperada sea mucho menor de lo que parece".

Los 4 errores impositivos más comunes en el mundo cripto

La experta enumera los errores claves que no se deben cometer al invertir en criptomonedas:

1. Creer que solo se pagan impuestos cuando se pasa a pesos

Uno de los mitos más comunes es que los impuestos solo se generan cuando se vende cripto por pesos. En realidad, la ley argentina considera que cualquier venta, permuta o intercambio de criptomonedas puede generar Impuesto a las Ganancias, incluso si el dinero nunca sale de un exchange.

Los cuatro errores impositivos al operar con criptomonedas
Los cuatro errores impositivos al operar con criptomonedas

"Si compraste Bitcoin a u$s30.000 y vendiste a USDT cuando cotizaba a u$s60.000, esa diferencia es una ganancia gravada, aunque todavía no se haya convertido a pesos", señala la experta, quien enumera algunas claves a considerar:

2. No considerar el Impuesto sobre los Bienes Personales al holdear

Las criptomonedas tributan en el Impuesto sobre los Bienes Personales si el total del patrimonio supera el mínimo no imponible.

Como ejemplo, Nicola plantea "un inversor compró u$s50.000 en criptomonedas en 2023, pero en 2024 el mercado bajó y su portafolio vale u$s35.000. Aun así, debe tributar sobre el valor actual de la cartera porque el cálculo se hace al 31 de diciembre de cada año".

Además, remarca las siguientes claves:

3. No planificar los movimientos entre exchanges

"Los inversores suelen mover fondos de una plataforma a otra, operar en DeFi o hacer staking sin considerar que, según el tipo de transacción, ARCA puede interpretar algunos movimientos como permutas gravadas", advierte Nicola.

Y resalta: "Pasar USDT a Ethereum dentro del mismo exchange ya puede considerarse una venta gravada. Lo mismo puede pasar con swaps en plataformas descentralizadas".

"No se trata de evitar operar, sino de hacerlo con una estrategia fiscal clara", aconseja.

4. Creer que ARCA no tiene acceso a los datos

"Muchos piensan que ARCA no puede rastrear criptomonedas por ser 'descentralizadas', pero lo cierto es que ya existen regulaciones que obligan a las exchanges locales a informar transacciones", advierte Nicola. Y enumera los datos a las que puede acceder el organismo recaudador.

Por lo tanto, aclara las siguientes cuestiones:

"El ecosistema cripto sigue evolucionando en Argentina y el marco impositivo también. Entender cómo funciona la carga fiscal es clave para evitar sorpresas y asegurarse de que la rentabilidad de una inversión no se diluya en impuestos imprevistos", subraya Nicola.

Y completa: "Así como se analizan tendencias del mercado al invertir, incorporar una estrategia fiscal dentro de la planificación marca una gran diferencia en el resultado final".

Qué ventajas impositivas tiene apostar a Bitcoin en la Bolsa

Además de operar en exchanges, es posible invertir en criptomonedas a través de certificados de depósito argentinos (CEDEAR) de fondos cotizados (ETF) al contado emitidos por BlackRock, que se pueden operar en billeteras, bancos y aplicaciones financieras argentinas:

Impuestos a los activos financieros

"Un CEDEAR es un título que engloba acciones o títulos representativos de fondos comunes del exterior y cotiza en la el país con el tratamiento impositivo de una acción argentina", indica a iProUP Guillermo Pérez, del Grupo GNP.

Para las personas físicas, la renta de CEDEAR está exenta del Impuesto a las Ganancias, pero si se operase directamente el ETF en Wall Street, ARCA reclama un 15%, que también se abona en caso de venta de BTC en forma directa.

En el Impuesto sobre Bienes Personales, la tenencia de ETF o CEDEAR de esos ETF está alcanzada: 0,5% si cotiza en el país y con la tabla del 0,5% al 1,25% si opera afuera.

En tanto, el mínimo no imponible del Impuesto sobre los Bienes Personales para la suma de todos los bienes es de $293 millones (cerca de u$s270.000). Para las criptomonedas, este tributo se aplica con la escala de 0,5% a 1,25%.

"Los Exchange Traded Fund" (ETF) son fondos de inversión cotizantes en bolsa. El más conocido es el Standard and Poor's 500, que replica el comportamiento de las principales compañías de EE.UU.

Ya existen 11 ETF de Bitcoin en EE.UU., de los cuales IBIT, de BlackRock, es el más importante. También hay otros 22 listados en bolsas de otros países.

Así, los tenedores estarán indirectamente apostando a Bitcoin, pero no serán tenedores de la divisa, sino titulares de acciones que representan una fracción de los ETF.

 "Estos CEDEAR tienen un perfil de volatilidad que se asemeja al de una acción y permiten una exposición más regulada", concluye Rodrigo Terré, gerente comercial de First Capital Markets.

Te puede interesar