Con la reciente decisión del Banco Central (BCRA) de bajar la tasa de interés y eliminar el mínimo para todo el sistema, las entidades financieras están compitiendo libremente, ofreciendo distintas tasas de interés (TNA) en un intento por atraer a los ahorristas hacia sus productos.

En este contexto, el dólar MEP ha experimentado una cotización favorable en las últimas semanas, generando demanda entre aquellos que buscan resguardar sus pesos en dólares y combatir la inflación.

A pesar de esta tendencia ascendente en la cotización, los consumidores se apresuran a comprar anticipando que el techo será aún más alto en los próximos días.

Ezequiel Baigorria, Product Owner de Inversiones de Reba, destaca a iProUP que, a pesar de los últimos cambios del BCRA, los ahorristas más conservadores siguen optando por invertir en plazos fijos, con Reba ofreciendo una de las mejores tasas del sistema, alcanzando un TNA del 75%".

La experiencia para realizar ambas inversiones es rápida y sencilla. Tanto hacer un plazo fijo como comprar dólar MEP pueden demorar apenas un minuto. Las personas eligen el instrumento de inversión que les brinde mayor seguridad para cuidar su dinero.

"El dólar MEP es muy demandado por nuestros usuarios", explica Baigorria. "Les permite protegerse contra la inflación y dolarizarse sin el tope de los 200 USD. También valoran la posibilidad de la acreditación automática, que les permite programarla al momento de la compra o esperar a un momento más favorable, dado que los valores de los bonos suelen cambiar".

 

En el transcurso del 2023, el dólar aumentó un 202% frente a una inflación del 211%, dejando atrás las tasas de interés de plazos fijos que promediaron alrededor del 100%.

Estos datos, destacan desde Reba, refuerzan la importancia de diversificar entre distintas opciones de inversión para resguardar los ahorros en momentos de incertidumbre.

"Las personas que apostaron a la baja de la inflación e hicieron plazo fijo se vieron beneficiadas con el carry trade, incrementando su capital en USD", señala Baigorria.

"Sin embargo, esta estrategia podría verse comprometida si la inflación no sigue su curso descendente o si el dólar experimenta un rápido aumento, poniendo en riesgo la estrategia en cuestión de días", concluye.

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