En 2023, el presidente del Banco Central argentino, Miguel Ángel Pesce, recibió una calificación de "F" por su desempeño, la más baja otorgada por la revista estadounidense Global Finance.
Compartió esta calificación con los líderes de Laos, Bounleua Sinxayvoravong, y Venezuela, Calixto Ortega Sánchez, lo que representa un bajo rendimiento en comparación con otros líderes financieros a nivel mundial.
Esta evaluación refleja desafíos económicos y financieros que Argentina enfrentó durante este año, lo que impactó negativamente en la percepción de su liderazgo en materia económica. La calificación "F" es un indicativo de la necesidad de mejorar políticas y estrategias económicas en el país.
Cada año, la revista estadounidense Global Finance publica sus Central Bankers Report Cards, que evalúan a los principales banqueros centrales del mundo con calificaciones que van desde A hasta F. Estas calificaciones abarcan diversos aspectos, como la política monetaria, supervisión financiera y transparencia.
En el informe más reciente, el presidente del Banco Central argentino, Miguel Ángel Pesce, recibió una calificación de "F". Esta calificación se basa en la incapacidad del Banco Central de Argentina para controlar la alta inflación y otros desafíos económicos.
Según Global Finance, la inflación en Argentina se mantuvo elevada en el primer semestre de 2023, y se esperaba que el Producto Bruto Interno (PIB) se contrajera.
Entre los factores negativos se destacó la falta de independencia del Banco Central argentino, ya que gran parte de la política monetaria está influenciada por el Ministro de Hacienda en funciones y un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Además, se señaló que el canal de crédito en Argentina es pequeño, lo que limita la efectividad de las tasas de interés para controlar la economía.
En contraste, los banqueros centrales de India, Suiza y Vietnam fueron calificados con A , destacándose por su desempeño en el ámbito financiero.
Esta calificación refleja los desafíos económicos que enfrenta Argentina y la necesidad de abordarlos para mejorar su calificación en el futuro.
Durante el último año, los banqueros centrales se han enfrentado al desafío de estabilizar los precios sin perjudicar sus respectivas economías.
Incluso aquellos cuyos mandatos se centran en tipos de cambio o la estabilidad financiera han tenido que lidiar con las presiones inflacionarias.
Uno de los protagonistas destacados en este escenario es Diego Labat, presidente del Banco Central del Uruguay (BCU), quien recibió una calificación de "A" por su desempeño en 2023.
Esta es la calificación más alta para un titular del Banco Central del Uruguay desde 2014, cuando Global Finance comenzó a medir su desempeño.
Labat comparte su calificación con otros tres colegas en América Latina: Roberto Campos Neto de Brasil, José Cantero Sienra de Paraguay y Julio Velarde Flores de Perú.
Se ha observado una mejora en el panorama inflacionario en la región, atribuida a medidas oportunas de política monetaria y la reducción del déficit fiscal.
Sin embargo, la incertidumbre persiste en la región, con la necesidad de mantener políticas contractivas para alcanzar las metas de inflación.
La gestión de Labat se ha destacado por su compromiso en la lucha contra la inflación, su capacidad de respuesta ágil ante condiciones económicas cambiantes y la iniciativa de recortar tasas para estimular el crecimiento en tiempos de desaceleración económica.
Este informe refleja la continuación del desempeño positivo de Labat en el Banco Central del Uruguay y su contribución al éxito económico del país.