El interés por emprender desde joven crece con fuerza. Según Junior Achievement, el 66 % de los adolescentes de 13 a 17 años muestra ganas de iniciar un negocio cuando sean adultos.
Esto no es solo una moda, sino una señal de que una nueva generación quiere generar sus propias oportunidades.
Aunque muchos creen que arrancar un negocio requiere mucha plata, la realidad es que muchos emprendimientos juveniles exitosos se basan en habilidades que ya tienen, creatividad y poca inversión inicial.
A continuación, cuatro ideas simples para que un adolescente con motivación pueda arrancar hoy a emprender.
Muchos dueños de pequeñas empresas saben que las redes sociales son clave, pero no tienen tiempo ni conocimientos para gestionarlas bien. Jóvenes con habilidades digitales pueden ayudarlos creando contenido, programando publicaciones y manejando la interacción.
Para comenzar se puede ofrecer un paquete claro, como por ejemplo "12 posts al mes por x dinero", mostrando ejemplos o experiencias previas.
Los padres buscan tutores confiables y accesibles, y prefieren a alguien cercano en edad que entienda a los chicos.
Es importante empezar con las materias que realmente domines. Armá un resumen con tus calificaciones y estilo de enseñanza, y ofrece tus servicios a familiares o vecinos con chicos que necesiten apoyo.
Artistas y diseñadores pueden vender sus creaciones sin invertir en stock, usando plataformas que imprimen y envían los productos solo tras la compra, como camisetas o fundas. Estas plataformas suelen pagar entre 10 % y 20 % de comisión.
Algo clave es elegir un nicho y ser constante subiendo diseños, promocionándote en redes sociales y colaborando con influencers pequeños.
Muchos adultos y pequeñas empresas requieren ayuda para usar dispositivos, redes sociales o solucionar problemas informáticos básicos. Los adolescentes con conocimientos digitales pueden ofrecer capacitación, instalación y soporte.
Los primeros pasos pueden ser con familiares y conocidos para ganar confianza y luego llegar a otros clientes.