Por primera vez en lo que va de 2025, las pretensiones salariales de los argentinos crecieron por debajo de la inflación, una señal que podría marcar el inicio de una nueva etapa en el mercado laboral.
Según la última edición del Index del Mercado Laboral de Bumeran, en mayo el salario pretendido promedio fue de $1.588.986, apenas un 0,99% más que en abril, mientras que el IPC mensual fue del 1,5%. Esto implica que, en términos reales, los trabajadores están ajustando sus expectativas a la nueva dinámica económica.
"El registro rompe la tendencia de los últimos meses. Sin embargo, en la evolución interanual, las remuneraciones solicitadas aún superan la inflación acumulada", explica a iProUP Federico Barni, CEO de Bumeran. En efecto, en la comparación interanual, el salario solicitado subió un 85,97%, contra una inflación acumulada del 43,5%.
Fuente: Bumeran
Expectativas más moderadas: qué dicen los economistas
Para Aldo Abram, economista de Libertad y Progreso, este freno de la suba de las pretensiones salariales aparece porque "venimos de una fuerte caída del poder adquisitivo desde mediados de 2023, cuando empezó la aceleración inflacionaria, y eso todavía pesa en las decisiones de los trabajadores".
En diálogo con iProUP, el experto añade que el nuevo contexto de estabilidad nominal genera un cambio en la percepción del ingreso. "Cuando la inflación era del 10% o más mensual, perdías plata solo por tener pesos en la mano. Eso hoy no pasa. Entonces, aunque nominalmente ganes lo mismo, el dinero te rinde un poco más. Esa mejora no aparece en las estadísticas, pero sí en el bolsillo", detalla.
Abram también remarca que la baja inflación altera el ritmo de las expectativas: "Después de dos años de acostumbrarte a gastar menos, tu expectativa de sueldo no crece tanto de un mes a otro. Y si no tenés urgencia o no ves que los precios se escapen, no sentís presión para pedir más".
Marcos Zocaro, tributarista y autor del libro Manual de Criptoeconomía, ya había planteado en el informe anterior que las expectativas salariales muestran también un fenómeno sociocultural: "El sueldo 'millonario' en pesos ya no genera impacto psicológico. El número impresiona menos, y muchas veces no alcanza para cubrir las necesidades de una familia tipo", asegura a iProUP.
Desde otra perspectiva, Martín Kalos, director de Epyca Consultores, también advierte que "el ingreso aspiracional perdió valor simbólico: ganar más de un millón de pesos ya no impresiona ni garantiza estabilidad".
Según su análisis, "hubo una destrucción estructural del poder adquisitivo que viene desde 1975. Hoy, incluso quienes tienen buenos ingresos sienten que no les alcanza, porque se mide todo en dólares y la devaluación cambió el estándar".
Abram coincide con ese diagnóstico: "La gente no compara su ingreso en pesos con el del año pasado, lo compara en dólares. Y ahí todos sienten que perdieron, incluso si cobran más".
Ranking de sueldos: rubros y puestos mejor y peor pagos
Según el seniority y el área, las diferencias de pretensiones son notables. Bumeran identificó los puestos con mayores y menores salarios solicitados:
Puestos mejor pagos:
- Supervisor/Jefe: Impuestos – $3.850.000
- Senior/Semisenior: Ingeniería de Producto – $3.500.000
- Junior: Minería, Petróleo y Gas – $2.250.000
Puestos con menores pretensiones:
- Supervisor/Jefe: Soporte Técnico – $975.000
- Senior/Semisenior: Camarero – $825.000
- Junior: Camarero – $725.000
Además, los salarios promedio por categoría se ubicaron en:
- Supervisor/Jefe: $2.237.660 (+1,45% mensual)
- Senior/Semisenior: $1.618.027 (+0,8%)
- Junior: $1.144.715 (+1,24%)
Fuente: Bumeran
Brecha de género: cuánto menos piden las mujeres
Aunque las mujeres incrementaron más sus pretensiones salariales que los varones durante mayo, la brecha sigue siendo del 6,31% en promedio según el informe:
- Hombres: $1.627.453 (+0,49% mensual)
- Mujeres: $1.530.920 (+3,69% mensual)
Donde más se nota la diferencia es en los cargos de supervisor y jefe. Las ejecutivas piden en promedio $2.036.205, contra $2.373.839 de los varones. La diferencia asciende al 16,58%.
El nuevo "techo aspiracional"
Un fenómeno que se profundiza mes a mes es que el "sueldo millonario" perdió impacto simbólico.
Como señalan los expertos consultados por iProUP, "ya no alcanza con ser millonario en pesos, porque hoy todo se mide en dólares y el nivel de vida está condicionado por esa referencia".
En este escenario, las pretensiones salariales, aunque más moderadas, siguen mostrando una búsqueda por anticiparse a la inflación y mantener poder adquisitivo. Pero con una economía más estable, es probable que esas expectativas se ajusten y reflejen una nueva etapa en el mercado laboral argentino.