El cofundador de la red de Solana, Anatoly Yakovenko, afirmó que el tráfico malicioso alcanzó picos cercanos a los seis terabits por segundo, aunque la magnitud del ataque no pudo ser verificada de forma independiente.
De esta forma, la blockchain de SOL habría sido víctima esta semana de un ataque distribuido de denegación de servicio (DDoS) de gran magnitud, de acuerdo con declaraciones públicas de sus principales desarrolladores y de cuentas vinculadas a su ecosistema.
Según algunas estimaciones difundidas en las redes sociales, apuntarían a que el tráfico del ataque alcanzó picos cercanos a los seis terabits por segundo (Tbps).
Por su parte, Yakovenko, escribió en su cuenta de X que la blockchain estaba sufriendo un ataque DDoS de seis Tbps.
Por otro lado, en la misma jornada, David Rhodus, CEO de Pipe Network, el proyecto de infraestructura física descentralizada (DePIN) construido sobre Solana, calificó el incidente como un ataque a "escala industrial".
Desde Pipe Network afirmaron además que se trataría de "uno de los mayores de la historia de Internet", y señalaron que un volumen de seis Tbps equivale a miles de millones de paquetes de datos por segundo.
Los ataques DDoS buscan saturar sistemas informáticos mediante el envío masivo de tráfico desde múltiples dispositivos, provocando interrupciones, lentitud o la caída total de los servicios.
En esta línea, un gráfico compartido por Pipe Network sugiere que Solana habría enfrentado el cuarto mayor ataque DDoS jamás registrado.
Sin embargo, existen precedentes recientes que ponen en jaque esta afirmación, ya que solo en 2025, Cloudflare reportó haber mitigado un ataque de 29,7 Tbps, KrebsOnSecurity informó de otro de 6,3 Tbps, y la empresa Gcore reveló un ataque de seis Tbps.
De esta forma, ninguno de estos tres eventos apareció dentro de los datos publicados en el gráfico que Pipe Network difundió.
Por otro lado, Yakovenko describió el ataque como "alcista", una expresión común en el sector cripto para referirse a señales positivas del mercado.
Según explicó el cofundador de SOL, esto implicaría que "alguien está gastando tanto como la cadena gana en ingresos para enviarlo", sugiriendo que el costo del ataque sería comparable a los ingresos generados por la red.
En paralelo, Pipe Network destacó además que, bajo una carga de este tipo, lo habitual sería observar un aumento significativo de la latencia, pérdida de bloques o retrasos en la confirmación de transacciones, aunque nada de esto se vio en la blockchain de SOL.