En las últimas horas, una brisa fresca resopla en el mercado cripto: el miércoles, la capitalización del ecosistema subió 4% tras semanas en rojo, hasta superar los u$s3,1 billones.
Bitcoin fue el que se llevó las miradas: pudo pasar los u$s90.000 e intentará defenderlo como soporte. Pero uno de sus rivales es seguido de cerca por los inversores.
La criptomoneda que mira el mercado
Ethereum registró un alivio técnico en las últimas sesiones y cotiza, al momento de esta redacción, por encima de los u$s3.000. El activo anotó una suba superior al 5% en las últimas 4 horas.
Ese movimiento llega en paralelo a entradas significativas en fondos institucionales: los fondos cotizados (ETF) cripto mostraron compras netas recientes que incluyeron casi u$s79 millones hacia productos ligados a Ethereum. Ese flujo actúa como un ancla de demanda en un mercado que, semanas atrás, sufrió salidas masivas y fuerte volatilidad.
A la hora de justificar el pequeño rebote hay que decir que el empuje es mixto:
- Por un lado, los ETF facilitan la llegada de dinero institucional sin complicaciones de custodia, lo que ofrece un soporte técnico a Ethereum
- Por otro, el mercado está sensible a los mensajes de la Fed y a la liquidez global
En este último punto, se pueden incluir expectativas de recorte de tasas que impulsan apetito por activos de riesgo y beneficiaron el rebote reciente.
Claves de la recuperación de Ethereum
Además, la narrativa de la tokenización, con un posible "superciclo" esperado por algunos gestores para comienzos de 2026, vuelve a poner el foco en Ethereum como infraestructura clave.
Ethereum: fundamentos y señales de alerta
Las métricas on-chain no son monocordes: el staking de ETH muestra signos de enfriamiento. "Los nuevos depósitos a contratos de staking se ralentizaron y los rendimientos promedio (APY) cayeron conforme creció la base de ETH stakeado", resume a iProUP el analista financiero Rodrigo Mansilla.
Para el experto, "eso reduce el incentivo para inmovilizar monedas en posiciones largas y obliga a comparar staking con otras oportunidades DeFi".
En paralelo, indicadores como el volumen y el perfil de liquidez señalan que la resistencia entre u$s2.850 y u$s3.000 concentra grandes clusters de suministro: si esa zona no se supera con volumen, la corrección podría reactivarse.
Para otro de los especialistas consultados, Rubén Peralta, Ethereum "está en una fase de compresión entre soportes y resistencias clave". El analista menciona a iProUP los niveles a vigilar:
- Soportes: u$s2.800 (primer piso) y u$s2.600-2.500 (soporte estructural en escenario bajista)
- Resistencias: u$s3.000-3.200 (muro corto plazo) y u$s3.300-3.500 (resistencias superiores que validan un giro)
"Un cierre diario por encima de u$s3.200, con aumento de volumen, confirmaría la intención compradora y abriría camino hacia u$s3.500 en las próximas semanas", indica el experto, sugiriendo un upside potencial de 17%. En sentido contrario, pérdida de u$s2.800 puede acelerar ventas y llevar a u$s2.500 como zona de contención.
En cuanto a las proyecciones a corto plazo, Rodrigo Mansilla plantea tres escenarios posibles:
- "El más probable, si los flujos de ETF se sostienen, ubica a ETH oscilando entre u$s2.800 y u$s3.500, con potencial para un avance gradual hacia el límite superior"
- "El escenario alcista se materializaría con una ruptura sostenida sobre u$s3.500, la cual, acompañada de flujos fuertes, podría gatillar un rally hacia u$s4.000 en las próximas semanas, dependiendo de datos macroeconómicos favorables"
- En tanto, el caso bajista se activaría ante un fracaso en "cerrar arriba de u$s3.200 o una retirada de volumen, lo que llevaría a ETH a testear la zona de soporte clave de u$s2.600-u$s2.500"
Ethereum: lo que viene
Proyecciones optimistas, como la de Tom Lee que sitúa a ETH en u$s9.000 con el arranque de la tokenización, resumen un posible catalizador estructural.
Pero es necesario jerarquizar: la tokenización puede generar demanda relevante para Ethereum a mediano plazo, pero no elimina riesgos a corto plazo (liquidez, ETF, tasas).
Es razonable considerar escenarios en los que la tokenización acelera la demanda en 2026, pero esperar subas verticales inmediatas sin condiciones de mercado favorables es arriesgado.
Los expertos pone la mira en lo que deben mirar los traders e inversores:
- Volumen en ruptura: buscar confirmación de compras reales, no solo picos de precio
- Flujos de ETF: si las entradas se sostienen, el soporte institucional cambia el riesgo relativo
- Datos macro: decisiones de tasas y liquidez global condicionan el apetito por riesgo
- On-chain: métricas de staking, actividad de contratos y concentración de suministro
El caso es que Ethereum volvió a demostrar su doble naturaleza de activo de infraestructura con demanda estructural y, al mismo tiempo, activo sensible a la liquidez y al sentimiento. Cotizando por encima de los u$s3.000, luego de un repunte de más del 5%, ETH ofrece oportunidades tácticas, pero exige gestión de riesgo.
La clave para los próximos días, de acuerdo a lo que analizan los analistas, será si las entradas institucionales vía ETF se transforman en una tendencia sostenible o se quedan en un alivio técnico pasajero. La tokenización puede ser el motor de largo plazo. En el corto plazo, el mercado decidirá si confirma el rebote o lo descuenta con otra corrección.