La propuesta del Donald Trump de entregar cheques de estímulo de u$s2.000, financiados con ingresos arancelarios, generó también la atención entre los inversores en criptomonedas.
Ya que su implementación podría generar un nuevo flujo de liquidez reactivar al Bitcoin y otros criptoactivos, y según analistas y datos históricos apuntan a que podría haber un efecto, aunque limitado, y condicionado por el entorno macroeconómico actual.
Trump y un estímulo que podría despertar a BTC
Según trascendió, la Casa Blanca informó que Trump sigue comprometido con un pago individual de u$s2.000 por persona, financiado con aranceles.
Aún no se definió con precisión la estructura, si será un cheque directo o una deducción fiscal, ni los criterios completos de elegibilidad, por ejemplo, se menciona que los hogares con ingresos menores a u$s100.000 podrían calificar.
Los ciclos anteriores de estímulo, como los cheques entregados durante 2020 y 2021, mostraron que la liquidez directa puede impulsar compras minoristas de riesgo, incluyendo criptomonedas.
Impacto potencial en el mercado cripto
Según el análisis de los especialistas en el tema, hay dos escenarios principales:
- Efecto a corto plazo: Si los pagos se entregan como cheques directos, se podría generar un incremento inmediato en la liquidez y quizá un repunte en compras de criptoactivos por parte del inversor minorista. En períodos previos, los exchanges observaron entradas post estimulo, y Bitcoin registró alzas dentro de los 30 días posteriores al pago.
- Limitaciones para un efecto sostenible: No obstante, el panorama macroeconómico actual es muy distinto al de los estímulos anteriores. Tasas de interés elevadas, menor participación minorista y un sentimiento de riesgo más débil podrían frenar que ese nuevo flujo de dinero se traduzca en un rebote duradero del mercado cripto.
En resumen, aunque el estímulo podría generar un repunte temporal, es poco probable que por sí solo revierta una tendencia bajista o dé inicio a un ciclo alcista amplio sin que cambien las condiciones externas.
Para los inversores en criptoactivos, la posibilidad de que un nuevo estímulo federal en EE.UU. accione una subida de Bitcoin u otras monedas digitales es un elemento de interés, pero no una garantía.
En paralelo, como advierten los analistas, el impacto depende de muchos factores externos que, según el momento, podrían neutralizar el estímulo.
En el escenario planteado, los pagos inmediatos podrían generar un pequeño "sprint" en el mercado cripto, pero sin una mejora de fondo en las condiciones macroeconómicas y un incremento real del apetito por riesgo, es poco probable que ese estímulo marque el inicio de una nueva fase alcista.