Con tecnología en la nube y acuerdos locales, Visa acelera su expansión y preocupa a reguladores por posible concentración de mercado
05.11.2025 • 14:30hs • Equilibrio en crisis
Equilibrio en crisis
La estrategia de Visa con Pismo plantea dudas sobre la competencia en pagos digitales
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La compra de la fintech brasileña Pismo por parte de Visa, por u$s1.000 millones, en enero de 2024, fue una operación estratégica que le permitió consolidar su negocio de pagos digitales.
Sin embargo, preocupa ahora el impacto que esta integración podría tener tener en la competencia regional.
Pismo, nacida en São Paulo, se posicionó como una de las plataformas más robustas del continente.
Su tecnología en la nube permite:
- emitir tarjetas
- procesar pagos
- administrar cuentas bancarias a gran escala
Actualmente, gestiona más de u$s40.000 millones al año y conecta más de 80 millones de cuentas.
"La adquisición de Pismo nos permitirá ofrecer capacidades bancarias modernas a nuestros clientes y socios en todo el mundo", señaló Visa en su comunicado oficial cuando concretó la adquisición.
Visa se expande, pero crecen las dudas sobre el impacto en la competencia
Al sumar esta infraestructura a su red global, Visa deja de depender de proveedores externos y se posiciona como un actor integral, capaz de ofrecer soluciones end-to-end.
Pero más allá del salto tecnológico, la operación plantea interrogantes sobre el equilibrio competitivo en América Latina.
Visa sumó una plataforma de última generación a su portafolio pero también avanza hacia una integración vertical que le permite controlar tanto la red de pagos como la infraestructura bancaria que la sustenta.
Desde su adquisición por parte de Visa, Pismo reforzó su presencia en América Latina y comenzó a operar activamente en el ecosistema argentino.
Un ejemplo clave fue la alianza con Brubank, que en abril de 2025 se convirtió en el primer cliente local en adoptar su plataforma nativa en la nube.
Además, la colaboración entre Pismo y ABN AMRO para lanzar la tarjeta BUUT —diseñada para la Generación Z y desarrollada en apenas diez semanas— demuestra la agilidad operativa que Visa ahora puede ofrecer gracias a esta integración.
Más detalles sobre la estrategia de expansión de Visa
Estos ejemplos demuestran cómo la expansión de Visa es una cuestión de escala, pero también de velocidad y penetración en segmentos estratégicos del mercado regional.
Esto le otorga una ventaja estructural frente a competidores como Mastercard y frente a otras fintech independientes que operan en la región.
En la Argentina, empresas como Ualá, Pomelo y Mercado Pagoenfrentan un escenario más complejo: Visa ahora puede ofrecer servicios que antes tercerizaba, y esto podría modificar su relación con actores locales y alterar dinámicas de colaboración.
Autoridades de Defensa de la Competencia en Argentina y otros países latinoamericanos comenzaron a revisar el alcance de esta operación: el antecedente de Prisma -cuando Visa fue obligada a desinvertir por prácticas anticompetitivas- vuelve a estar sobre la mesa.
Los cuestionamientos son muy concretos: ¿puede una empresa que ya domina la red de pagos sumar también el control de una plataforma de procesamiento sin afectar la competencia? Para los reguladores, la integración con Pismo podría consolidar una posición dominante difícil de revertir.
Este tipo de concentración preocupa especialmente en un mercado que, según Straits Research, podría alcanzar una valuación global de u$s17.000 millones hacia fines de la década. En ese contexto, garantizar condiciones equitativas para nuevos jugadores se vuelve clave para evitar distorsiones estructurales.
