Luego de que se conociera la intención de la firma Sur Energy y OpenAI para crear un datacenter de inteligencia artificial en la Patagonia dentro de la iniciativa global Stargate, un importante emprendedor argentino deslizó que es posible que en el futuro los gobiernos lancen impuestos a la capacidad de cómputo de estas instalaciones.

Retenciones a la inteligencia artificial

El programador y emprendedor argentino Santiago Siri participó de una entrevista con en el canal de streaming Gelatina en el que mostró un complejo de ocho edificios que Nvidia, principal productor de microchips para IA; y el gigante de infraestructura Oracle están construyendo en Texas, EE.UU., están levantando para la IA.

"Es un poco lo que va a suceder en la Patagonia: van a construir galpones enormes, en los que van a estar albergados unos 50.000 chips de última generación. Es un trabajo de ingeniería bastante complejo y lo que hará esta fábrica es producir inteligencia", remarcó.

Posteriormente, remarcó que "es un poco lo que tenemos que pensar: tal vez el cómputo se vuelva la nueva soja en Argentina y tengamos la posibilidad de exportar cómputo al mundo. Talvez, el día de mañana, este cómputo tenga aranceres, como tiene la soja, y pueda generar un beneficio público para nuestra sociedad".

Luego de la polémica de las declaraciones, un usuario de Twitter le preguntó a Grok, la IA que funciona dentro de la red social, cómo calificaría del 1 al 10 a la posibilidad de que el cómputo tribute, donde "1 es una idea muy brillante y 10 es una idea muy estúpida".

"Le calificaría con un 9. Cobrar aranceles al cómputo exportado, como si fuera un commodity físico, ignora que se trata de un servicio intangible y altamente competitivo que depende de innovación y eficiencia, no de barreras fiscales", respondió Grok.

Además, resaltó que "en lugar de generar beneficios públicos sostenibles, desincentivaría inversiones y nos dejaría atrás en la carrera global de IA y datos, priorizando cortoplacismo sobre crecimiento exponencialmejor apostar por regulaciones mínimas para atraer talento y capital".

Retenciones a la inteligencia artificial

El objetivo es convertirde Stargate es inversión proyectada, que podría alcanzar los u$s25.000 millones, fue presentada como el mayor proyecto de infraestructura en la historia del país, a través del Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI) que ofrece beneficios fiscales y seguridad jurídica durante 30 años.

Esto se enmarca dentro del proyecto oficial de convertir a Argentina en el principal generador y exportador de potencia computacional de América Latina, aprovechando su potencial energético y el vínculo estrecho con Estados Unidos. Las claves del proyecto son:

"Este hito va más allá de la infraestructura. Se trata de poner la inteligencia artificial en manos de la gente de toda la Argentina" explicó Sam Altman, CEO de OpenAI, en referencia al megaproyecto.

Por su parte, Emiliano Kargieman, cofundador de Sur Energy y fundador Satellogic, agregó: "El proyecto Stargate Argentina representa una oportunidad histórica para el país. Combina nuestro potencial único en materia de energías renovables con el desarrollo de una infraestructura crítica para la inteligencia artificial a escala mundial".

Para el ejecutivo, "esta alianza convierte a Argentina en un actor relevante en el nuevo mapa digital y energético mundial, creando puestos de trabajo de calidad, atrayendo inversiones internacionales y demostrando que la innovación y la energía pueden ser motores complementarios del desarrollo sostenible".

La instalación tendrá una capacidad de hasta 500 megawatts, alimentada íntegramente por fuentes renovables, lo que refuerza el compromiso ambiental del proyecto y su alineación con las tendencias globales en infraestructura sustentable.

La decisión de instalar el centro en la Patagonia argentina responde tanto a razones técnicas como geopolíticas. Desde OpenAI destacaron la "afinidad" con el gobierno nacional y la velocidad con la que se avanzó en las negociaciones.

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